El Gran Premio de Australia de la Fórmula 1 será pospuesto para el final de la temporada de este año, por lo que Baréin pasará a ser la prueba que abra el calendario en marzo, comunicó a Reuters el dueño del equipo Aston Martin, Lawrence Stroll.
La medida, debido a la pandemia de COVID-19 y las restricciones de cuarentena, aún no ha sido confirmada por la F1 o los organizadores locales.
“Melbourne ha sido, no se anunció oficialmente, pero lo será, no cancelada pero pospuesta. Iremos allí en algún momento del otoño (boreal) y la primera carrera será en Bahrein”, dijo el multimillonario canadiense.
Los equipos acordaron el cambio en una reunión virtual con el nuevo director ejecutivo de la F1, Stefano Domenicali, el lunes pasado. Fuentes dijeron que en la misma reunión también se acordó que las pruebas de pretemporada se trasladen del Circuit de Catalunya de Barcelona a Bahrein, sin fijar una fecha.
El calendario de carreras de la temporada pasada tuvo que ser rediseñado debido a la pandemia y finalmente constó de 17 pruebas en Europa y Medio Oriente. Algunos circuitos, incluido el de Bahrein, albergaron dos grandes premios.
Stroll, también presidente ejecutivo del fabricante de autos deportivos Aston Martin, que regresa a la F1 como constructor por primera vez en 60 años en un cambio de marca del equipo Racing Point, espera dificultades persistentes por la pandemia.
“Creo que nos esperan dos o tres meses difíciles”, sostuvo Stroll. “Hay una luz al final del túnel con la vacuna. Creo que las primeras carreras serán un poco desafiantes”.
“Creo que lo peor ya pasó y hemos aprendido durante el año pasado cómo proceder este año”, agregó.
Stroll y su hijo Lance, quien conduce para Aston Martin, dieron positivo a coronavirus virus el año pasado.
EVG
