Momentos de angustia se vivieron en el partido entre el Vitesse y el NEC Nijmegen, en duelo de la Eredivisie, la primera división del futbol de Países Bajos.
Los futbolistas del Vitesse celebraban con los aficionados que se dieron cita al estadio, en la victoria de su equipo por marcador de 1-0, cuando las gradas se vinieron abajo.
El peso de los aficionados, mezclado con los brincos que estaban dando para celebrar, provocaron el colapso de las tribunas en un incidente que no provocó lesionados de gravedad.
“Me he quedado mudo, por la cabeza me han pasado todo tipo de cosas. El contenedor que había debajo ha impedido males mayores”, dijo el director general del NEC Nijmegen, Wilco van Schaik.
El estadio del NEC Nijmegen fue construido en 1939, aunque de acuerdo con van Schaik, pasó todas las pruebas por parte del gobierno.
rmp