El ambiente de la Fórmula 1 cada vez se siente más en la Ciudad de México, a unos días de que la máxima categoría del deporte motor vuelva a encender las pasiones en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Más de 100 mil personas se dieron cita en Paseo de la Reforma para presenciar el Red Bull Show Run, una exhibición en la que el gran atractivo era el piloto mexicano Sergio Checo Pérez, quien deleitó a la afición que se hizo presente.
“No tengo palabras para agradecer tanto cariño y apoyo nos vemos el domingo para celebrar y que siga la fiesta”, dijo el tapatío al término del evento, recalcando que el Gran Premio de México es para celebrar y donde se espera él quede entre los tres primeros lugares.
Al grito de “¡olé, olé, Checo, Checo!” la afición tricolor le dejó saber al volante tapatío que lo apoyan de cara a la carrera que disputará este domingo, en la que se podría convertir en el primer mexicano en subir al podio en tierras aztecas.
En punto de las 10 de la mañana arrancaron las actividades del Show Run, con la Final Nacional de la Red Bull Kart Fight, en una carrera que al final ganó Rodrigo Vega. Luego de eso, comenzó la fiesta.
Aaron Colton, Didier Goirand e Iván Ramírez fueron los primeros en exhibir sus habilidades en la motocicleta y recorrieron la recta desde la Glorieta de la Diana Cazadora hasta el Ángel de la Independencia mostrando su dominio y haciendo trucos en su vehículo.
El piloto sensación, Mateo García, vino después en su kart. De sólo seis años, el volante dio una demostración repleta de carisma, al recorrer el mismo circuito, mientras saludaba a los asistentes que coreaban su nombre.
Pero no fue sino hasta las 11 y media de la mañana que Checo Pérez salió en el RB7, el icónico monoplaza diseñado por Adrian Newey en el que Sebastian Vettel y Mark Webber consiguieron el Campeonato de Constructores en 2011. En aquella temporada, el alemán también se alzó como el monarca entre los pilotos de la Fórmula 1.
Desde su primera vuelta, Checo Pérez enseñó la potencia de su monoplaza, mientras se escuchaba el rugir del motor, que terminó de prender el ambiente entre los asistentes, quienes realizaron la “ola” a lo largo del circuito.
El volante tricolor dio muestra de su dominio en el monoplaza y deleitó a sus fanáticos con algunos trompos y donas, en el asfalto.
Entre cada una de sus exhibiciones, otros pilotos como Benito Guerra y Memo Rojas también salieron a hacer sus respectivas demostraciones.
Al finalizar su exhibición, Checo caminó por algunos metros, para saludar a los fans que se dieron cita en Paseo de la Reforma, envuelto en la Bandera de México y con “Cielito Lindo” de fondo, mientras era interpretado por mariachis.
“Muchísimas gracias a todos los que vinieron, los que hicieron posible este evento, nos lo merecemos todos después de lo que hemos pasado. Hoy es un día para celebrar y sentirnos muy orgullosos de nuestro país”, dijo.
El Gran Premio de México de F1 se disputará este domingo en punto de las 13:00 horas sobre el asfalto del Autódromo Hermanos Rodríguez, en una oportunidad de oro para que el volante de Red Bull consiga un nuevo podio.
En caso de colarse entre los tres primeros, Checo lograría subirse al podio por vez 15 en su carrera y quinta ocasión en lo que va de la Temporada 2021 de la Fórmula 1.
