El contrato del futbolista danés Christian Eriksen con el Inter de Milán llegó a su fin por mutuo acuerdo este viernes, seis meses después del paro cardiaco que el mediocampista sufrió con su selección en la pasada Eurocopa.
La causa de esto se debe a que las normas sanitarias en Italia impiden que el oriundo de Middelfart juegue con un desfibrilador cardioversor implantable, aunque podría continuar con su carrera en otro lugar donde las reglas lo permitan.
El Inter se despide de Christian Eriksen
“El club y toda la familia Nerazzurri desean a Christian lo mejor en su futuro. Si bien el Inter y Christian toman caminos distintos, el lazo nunca se romperá. Los buenos momentos, los goles, las victorias, esos festejos del Scudetto con los aficionados afuera del San Sir, todo eso perdurará por siempre en la historia de los Nerazzurri”, indicó el Inter en un comunicado.
Eriksen no ha jugado desde que se desplomó de rostro en la cancha durante el primer partido de Dinamarca en la Eurocopa frente a Finlandia el pasado 12 de junio. Sus compañeros crearon un muro protector con sus cuerpos en torno a él al tiempo que el personal médico lo resucitaba con un desfibrilador.
Eriksen pasó una semana en el hospital, donde se le implantó una especie de marcapasos.
El jugador de 29 años llegó al Inter en enero de 2020 proveniente del Tottenham con su contrato que vencía en 2024. El mediocampista participó en 60 partidos con los Nerazzurri, ayudado al club a conquistar la Serie A la temporada pasada, y anotó ocho goles.
EVG