La NFL está planeando que el espectáculo de medio tiempo para el próximo Super Bowl, que se llevará a cabo en en el Mercedes-Benz Superdome de Nueva Orleans, supere todos los récords de audiencia y de ingresos publicitarios con la ayuda de la cantante Taylor Swift.
La intérprete de "Lover" declinó la oferta para actuar en el Super Bowl de este año debido a compromisos previos, pero según algunas fuentes es considerada por la NFL como la artista ideal para atraer distintos públicos, que no estén relacionados únicamente con el futbol americano.
Su relación mediática con el jugador de los Kansas City Chiefs, Travis Kelce, aumenta aún más el interés, pues en este periodo, la artista logró impulsar las ventas en mercancía del equipo y especialmente, del ala cerrada del equipo.
Roger Goodell, comisionado de la NFL, reconoció el potencial de Taylor Swift para convertir el próximo Super Bowl en el evento deportivo más visto de la historia, superando los 140 millones de espectadores registrados por la actuación The Weeknd y Dua Lipa.
Se estima que la presencia de la también compositora podría generar más de mil 300 millones de dólares en publicidad, casi el doble en comparación con el año anterior, pero aunque la oferta parece ser prometedora aún no se cierran los acuerdos entre ambas partes.
Taylor Swift enfrenta complicadas condiciones de la NFL
Fuentes cercanas a las negociaciones revelan que el contrato entre la NFL y Taylor Swift aún está en la fase de definición, sobre todo por las condiciones de pago que estipula la liga.
Una de las cláusulas es que la cantante no recibiría compensación económica por su actuación, siendo limitada a únicamente cubrir los gastos de viaje y producción que requiera para el evento, situación que algunos otros intérpretes han rechazado.
Además, la NFL tendría que ceder toda la libertad creativa y control del espectáculo a la 11 veces ganadora de los premios Grammy, lo cual, no sería impedimento, pues con la aceptación que tuvo "The Eras Tour", es un tema que seguro estará resuelto y no causará mayores controversias.
Esta estrategia, poco convencional en la industria, podría ser una apuesta arriesgada, pues generalmente se busca maximizar el impacto de la presencia del artista, pero en el caso de la originaria de West Reading, su audiencia está más que medida.
mmt