Katia Itzel García hará historia este fin de semana al convertirse en la primera árbitra central en un partido de Liga MX después de 20 años de que dicha oportunidad recayó en Virginia Tovar.
La Comisión de Árbitros designó a la originaria de la Ciudad de México para que sea la encargada de impartir justicia en el duelo de la Jornada 11 del Torneo Clausura 2024 entre Pachuca y Querétaro, mismo que se llevará a cabo el sábado 9 de marzo en el Estadio Hidalgo, justo un día después del Día Internacional de la Mujer.
Katia Itzel García, de 31 años de edad, comenzó su carrera en el arbitraje en el 2015 como amateur y un año después dio el salto al profesionalismo. Es silbante internacional con gafete FIFA y recientemente tuvo participación en la Copa Oro W, además de que el año pasado estuvo en el Mundial Femenil celebrado en Australia y Nueva Zelanda.
La silbante mexicana también tiene experiencia en partidos de la Liga MX Femenil y en encuentros correspondientes a competencias de la Concacaf.
Pachuca llega al cotejo contra Querétaro como uno de los líderes del Clausura 2024, pues si bien marcha tercero acumula 22 puntos, misma cosecha de Monterrey y Cruz Azul.
En el cotejo del sábado entre Tuzos y Gallos Blancos, Katia Itzel García estará acompañada por Alberto Morín y Erick Durón como asistente uno y asistente dos, de manera respectiva.
Katia Itzel García, la segunda después de Virginia Tovar
Virginia Tovar fue la primera mujer en la historia en fungir como árbitra central de un partido de la Liga MX el 22 de febrero del 2004.
Aquel día, la oriunda de Guadalajara, Jalisco, impartió justicia en el choque de la Fecha 6 del Clausura 2004 entre Irapuato y América en el Estadio Sergio León Chávez.
Al margen de la caída de las Águilas (1-2), la mala nota la dio Cuauhtémoc Blanco, quien al finalizar el juego le dijo a Virginia Tovar que mejor se pusiera a lavar platos.
Tovar Díaz no volvió a impartir justicia en algún cotejo de la Liga MX y puso fin a su carrera como árbitra en el 2008, nueve años después de haber comenzando su andar como silbante.
EVG
