Una triste noticia se dio a conocer apenas en el segundo día de los Juegos Olímpicos de París 2024 al revelarse que Lionel Elika Fatupaito, entrenador de boxeo del equipo de Samoa, murió en la Villa Olímpica.
La Asociación Internacional de Boxeo (IBA) expresó su pesar por el deceso de Lionel Elika , quien tenía 60 años de edad. Diversos medios reportan que la causa de su muerte fue un ataque cardíaco.
De acuerdo con información de AFP, el experimentado entrenador estaba en su habitación de la Villa Olímpica con otro deportista al momento de que sufrió el ataque cardíaco.
"Todos nosotros en la IBA enviamos nuestro más sentido pésame a la familia, amigos y colegas de Lionel Elika Fatupaito. Su dedicación y pasión por el deporte dejó una marca indeleble en la comunidad del boxeo. Su legado seguirá inspirando a las generaciones futura", fue el mensaje de la IBA ante esta lamentable noticia.
Lionel Elika estaba entrenando al pugilista Tupuola Ato Plodzicki-Faoagali para sus competencia en París 2024.
La muerte de Lionel Elika Fatupaito en la Villa Olímpica fue confirmada este sábado, pero ocurrió el viernes 26 de julio.
Ecuatoriana Palacios remonta en su debut en París 2024
María José Palacios Espinoza se sacudió la pasividad de los primeros tres minutos y firmó una remontada que hizo vibrar a la jornada inaugural del boxeo olímpico en la Arena del Norte de París.
Luego de verse abajo en las tarjetas de los cinco jueces después de los primeros tres minutos, la ecuatoriana reaccionó, soltó las manos y tomó la iniciativa para anotarse un triunfo el sábado 4-1 ante la experimentada sueca Agnes Alexiusson en los 60 kilogramos.
“Poco a poco, mi entrenador me fue dando las herramientas que tocaba ejecutar en esos asaltos y se dio la pelea para nosotros”, declaró la púgil de 25 años, orgullosa con su primer triunfo en unos Juegos Olímpicos, en su segunda participación.
Eliminada en la primera ronda hace tres años, Palacios no se iba a permitir que la historia se repitiera.
Con la balanza prácticamente en perfecto equilibrio, al menos en las tarjetas de los jueces, pero con el momento indiscutiblemente a su favor, la oriunda de Carchi solo repitió la dosis del segundo asalto. Mantuvo un paso al frente, la guardia en alto y la derecha con soltura. El público parisino hizo el resto.
Con cada derechazo, Palacios fue sumando adeptos. Un coro de gritos —en distintos acentos— de “¡Vamos María!”.
EVG