El América se enfrenta a una situación inédita desde que se reinstauró el formato de repechaje en el Guard1anes 2020 de la Liga MX, ya que por primera vez en nueve torneos, las Águilas tendrán que buscar la Liguilla a través del Play-in.
Desde que se reintrodujo esta regla en 2020, el América ha sido uno de los equipos más consistentes, logrando su pase directo a la Fiesta Grande sin necesidad de recurrir al repechaje.
El mal arranque de la campaña y particularmente la derrota contra Toluca dejaron a las Águilas en una posición vulnerable, obligándolos a transitar por una vía que nunca antes habían necesitado.
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La derrota en el Estadio Nemesio Díez encendió las alarmas en Coapa y puso fin a la racha de clasificación directa que el equipo venía manteniendo.
El sistema de repechaje en la Liga MX, si bien ha sido criticado por algunos aficionados y expertos, permite a equipos que no lograron un rendimiento destacado en la fase regular una segunda oportunidad para pelear por el título.
Por su parte, el Cruz Azul calificó de manera directa, como líder general, y aunque no superó al América como el club con más puntos en la historia de los torneos cortos, sí es el rival a vencer y junto a los Diablos Rojos del Toluca se puede decir que ambos son los favoritos para llegar a la final del Apertura 2024.
Las Águilas aún podrían enfrentar a las Chivas en el Play-in ya que al finalizar en 7 y Xolos en 8, el perderdor de esta serie se verá las caras contra el ganador del duelo entre las Chivas y el Atlas.
Si así se diera el caso, pues los de Coapa jugarían con el Rebaño por el último boleto a la Fiesta Grande y si logran avanzar, su rival en los cuartos de final sería el Cruz Azul, conjunto que goleó a los Millonetas por pizarra de 4-0.
El Play-in se llevará a cabo los días 20 y 21 de noviembre (primera serie) y 23 y 24 de noviembre (segunda serie).
La reintroducción del repechaje en la Liga MX ha sido un tema de debate entre aficionados y analistas.
Algunos argumentan que este formato resta mérito a los equipos que se esfuerzan por mantenerse en los primeros lugares durante toda la temporada, ya que aquellos que tuvieron un rendimiento inferior pueden colarse en la fase final y competir por el título. Otros, en cambio, defienden la inclusión del repechaje como una forma de mantener el interés en la liga hasta el último momento.
Con América en el Play-in, el formato de repechaje adquiere un nuevo matiz, ya que permite a uno de los equipos más populares y mediáticos de México una segunda oportunidad. Sin embargo, la presión es alta: las Águilas no solamente se juegan su lugar en la Liguilla, sino también el honor de mantener su imagen de consistencia en la Liga MX.
Para André Jardine y sus dirigidos, el camino al título ahora es más complicado. Los errores en partidos clave y el nivel de competitividad que se ha visto en la Liga MX este torneo obligan al América a realizar ajustes tácticos y mejorar la cohesión dentro del equipo si desean superar el Play-in y entrar con fuerza a la Fiesta Grande.
El compromiso y la mentalidad del América serán puestos a prueba en esta instancia, y la afición espera que, a pesar de esta situación inédita, el equipo demuestre por qué ha sido uno de los grandes protagonistas de los últimos torneos.
Este certamen será una verdadera prueba para André Jardine, quien ahora deberá demostrar que puede manejar al equipo en una situación de mayor presión y exigencia.