A sus 58 años, Mike Tyson está decidido a silenciar a quienes dudan de su capacidad para enfrentar a Jake Paul. Las críticas sobre su edad y las especulaciones sobre su preparación han hecho mucho ruido previo a este enfrentamiento, pero el excampeón mundial mostró en un entrenamiento abierto al público, que sigue siendo una auténtica máquina de poder.
En el evento, ‘Iron Mike’ impactó a los espectadores, incluido su rival, al enfrentarse a su sparring con una intensidad pocas veces vista en peleadores de su edad. El exboxeador de los pesos pesados demostró su velocidad y fuerza al lanzar golpes brutales a su compañero de entrenamiento, quien en más de una ocasión tuvo que retroceder ante la potencia del veterano.
La primera fecha para el combate tuvo que ser postergada debido a una enfermedad que afectó a Mike Tyson; sin embargo, tras su recuperación, el estadounidense mostró un cambio físico espectacular y asegura estar en la mejor forma de su vida. Y con este entrenamiento de exhibición, despejó cualquier duda sobre su estado físico.
Shocker recae en sus adicciones
“Aprendí que soy más fuerte de lo que creía. Cuando comencé a entrenar y acepté esta pelea, pensé ‘¿Qué rayos estaba pensando?’ Terminé el proceso y ahora la pelea es la fiesta”, declaró Tyson al finalizar su entrenamiento, listo para subir al ring.
El nacido en Brooklyn, dominó los pesos pesados con un estilo arrollador, y ahora, también parece estar decidido a demostrar que el tiempo no ha mermado su talento, mientras que Jake Paul tendrá que enfrentar la experiencia y potencia de uno de los boxeadores más temidos y respetados de la historia.