Los comentaristas más populares del futbol mexicano, Christian Martinoli y Luis García, se unieron a un nuevo proyecto cinematográfico, sin dejar de lado el deporte, pues fueron llamados para integrarse al doblaje de Blue Lock, uno de los animes deportivos más exitosos de la actualidad.
En esta colaboración con CrunchyRoll Latinoamérica, los narradores prestarán sus voces a un par de comentaristas que aparecen en la serie, llevando su inconfundible humor y dinamismo al público de las plataformas digitales.
“Estamos con todo en el fabuloso mundo del Anime y ahora somos parte de la exitosa serie Blue Lock de @crunchyroll_la poniendo nuestras voces en el doblaje de la serie... Como no encontramos un centro delantero bueno en México, nos fuimos a Japón, carajo!”, escribió Luis García en X.
Blue Lock narra la búsqueda de un delantero prodigioso para la Selección de Japón, mediante un exigente programa de formación. Este enfoque, centrado en el futbol, hace de la dupla de comunicadores una elección ideal, ya que su estilo desenfadado y apasionado encaja con la atmósfera de la serie.
Esta no es la primera vez que el par de comentaristas presta sus voces para un proyecto de doblaje, ya que en 2019 participaron en la película animada Parque Mágico de Paramount, donde dieron voz a los castores Gus y Cooper.
En esta nueva forma de la narración deportiva, los titulares de Los Protagonistas continúan ampliando su alcance, llevando su conexión y la pasión por el deporte más allá de los micrófonos tradicionales.
¿De qué trata Blue Lock?
Tras la actuación de Japón en el Mundial de 2018, donde quedó eliminado en los octavos de final, la Asociación de Futbol de Japón decidió cambiar la historia del deporte en su país. Así nace Blue Lock, un programa de entrenamiento diseñado para transformar a Japón en una potencia futbolística mundial.
El proyecto reúne a 300 jóvenes delanteros de ligas escolares en unas instalaciones de alta tecnología llamadas “Blue Lock”. Bajo la dirección de Jinpachi Ego, un entrenador tan brillante como excéntrico, los participantes se enfrentan a una filosofía revolucionaria.
De acuerdo con este nuevo sistema, Japón necesita un delantero egoísta, dispuesto a priorizar su ambición personal sobre el trabajo en equipo para alcanzar la grandeza en el futbol.
El protagonista, Yoichi Isagi, es un delantero que, junto a sus compañeros, debe demostrar que tiene lo necesario para convertirse en el goleador perfecto. Sin embargo, el camino no es sencillo, pues quienes fracasen en el programa serán eliminados, perdiendo para siempre la oportunidad de jugar en la selección nacional.
mmt
