Los requisitos de inmigración podrían facilitar la presencia de tenistas no vacunados contra el coronavirus en el Abierto de Australia, el primer torneo de Grand Slam de 2022, si cumplen una estricta cuarentena de 14 días.
La semana pasada, líderes políticos federales y estatales de alto nivel dijeron que era improbable que aquellos jugadores que no han completado la doble vacunación contra el COVID-19 recibirán el visado para participar en el torneo, que se disputará del 17 al 30 de enero en el Melbourne Park.
Temprano el lunes, un correo filtrado enviado por la WTA al Consejo de Jugadoras, publicado por The New York Times y el diario The Age, de Melbourne, sugiere que las jugadoras no vacunadas podrían recibir visas, pero deberán pasar dos semanas aisladas en cuarentena en un hotel.
El correo indica que la Federación Australiana de Tenis sigue consultando con el gobierno sobre los detalles debido a que el estado de Victoria espera llegar al 90% de vacunación en la población adulta el próximo mes, lo que "ha confirmado que las condiciones mejorarán de forma significativa para los jugadores participantes en el Abierto de Australia”.
VACUNAS, UNA POLÉMICA EN LA ATP
Ciertos jugadores, entre ellos Novak Djokovic (nueve veces campeón en Melbourne), insisten que vacunarse debe ser una decisión personal. Otros, como Andy Murray, sostienen que debe ser obligatorio en beneficio de la mayoría.
En el reciente Abierto de Estados Unidos, que culminó el 12 de septiembre, los espectadores debieron mostrar certificación de haber recibido al menos una dosis de la vacuna para ir a los partidos. Los jugadores no debieron cumplir con el requisito.
rmp