El marroquí Soufiane El Bakkali se colgó el oro en los 3 mil metros con obstáculos de atletismo en los Olímpicos de Tokio 2020.
Con su victoria, El Bakkali rompió con el dominio de Kenia, que en las últimas nueve ediciones (desde Los Ángeles 1984) de Juegos Olímpicos se había adjudicado el metal dorado.
Soufiane El Bakkali finalizó primero con un tiempo de 8:08.90. La plata se la llevó el etíope Lamecha Girma (8:10.38), mientras que el bronce quedó en poder del keniata Benjamin Kigen (8:11.45).
El último no nacido en Kenia que había ganado los 3 mil metros con obstáculos fue el polaco Bronislaw Malonowski en la edición de Moscú 1980.
El único atleta de Kenia que cosechó el oro en más de una ocasión en ese periodo fue Ezekiel Kemboi en Atenas 2004 y Londres 2012.
Al toque de campana Girma, Wale y El Bakkali se fueron por delante y el marroquí esperó a los 200 metros para acelerar, abriendo un hueco que le permitió celebrar su victoria en Tokio 2020 a media recta (8:08.90).
Otro de los eventos que más emoción causó fue en el que la holandesa Sifan Hassan obtuvo su primer oro en los Juegos Olímpicos al imponerse en los 5 mil metros femenil de atletismo.
Hassan imprimió un cambio ganador en la última vuelta que le permitió cruzar la meta con 15 metros de ventaja sobre la keniana Hellen Obiri. Venció con 14:36.79, seguida de Obiri (14:38.36) y de la primera etíope, Gudaf Tsegay (14:38.87).
Una de las imágenes que pasarán a la historia fue cuando se cayó y de inmediato se levantó y no paró hasta llegar en primer lugar y meterse a la final.
La atleta de 28 años de edad quiere conseguir en Tokio un triplete olímpico inédito, pues también competirá en las pruebas de mil metros y 10 mil metros en los Juegos Olímpicos.
Esas victorias mantuvieron a Hassan, la etíope de 29 años que ahora compite para Holanda, en la lucha por una tripleta dorada: los mil 500, los 5 mil y los 10 mil metros. Es algo que nadie había intentado y que precisará de ocho carreras en seis días.
Por su parte, Jasmine Camacho-Quinn ganó el oro en los 100 metros con vallas femenil.
Por segunda cita consecutiva, otra mujer puso a la isla caribeña en lo más alto del podio.
Camacho-Quinn cronometró 12.37 segundos, superando por 15 centésimas a la estadounidense Keni Harrison, la dueña del récord mundial que debió conformarse con la presea de plata. Fue una diferencia sideral para una carrera tan corta.
El griego Miltiadis Tentoglou se llevó el oro en salto de longitud, capitalizando las dolencias de los cubanos Juan Echevarría (plata) y Maykel Masso (bronce).
