Cuando las Guerreras Jaguar salieron hacia Honduras para el torneo America’s Women Bowl, jamás imaginaron los problemas que tendrían para regresar a suelo mexicano.
El equipo mexicano de futbol americano viajó hace unos días a suelo catracho para cumplir el sueño de representar a su país internacionalmente.
Sin embargo, las complicaciones estaban desde antes de llegar al torneo. Liquidar todo lo necesario para que las jugadores y cuerpo técnico pudieran participar en el certamen no fue fácil.
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Incluso, a través de redes sociales, el coordinador ofensivo del equipo, Eduardo López Barrientos, lanzó una iniciativa en su cuenta de Facebook para rifar un jersey autografiado por el corredor de los Vaqueros de Dallas, Ezekiel Elliot.
“Apoya a un equipo que está en sus últimos esfuerzos por liquidar todo lo que se requiere para participar en un torneo en Honduras y de paso gánate un jersey firmado”, se leía en la convocatoria.
El torneo empezó el viernes pasado y con él cayó la primera derrota de las Guerreras Jaguar contra Estados Unidos, antes de que el certamen fuera cancelado por la pandemia de coronavirus.
El presidente de la Federación de Futbol Americano de Honduras, Juan Raskoff, canceló el evento y ofreció ayuda para conseguir vuelos de regreso a precios razonables.
"En algunos de nuestros casos, los jefes entienden que no es culpa nuestra y otros tendrán que ver lo que les van resolviendo ”
Eduardo López
coordinador ofensivo
Pero el problema no acaba ahí, pues los boletos de las deportistas que tenían como destino final El Salvador no se pudieron utilizar, pues el gobierno de ese país centroamericano cerró las fronteras.
En entrevista con La Razón, López Barrientos aseguró que pese a todas las adversidades, el equipo está siendo tratado bien, y afirmó que hasta pasan la noche “en departamentos de lujo”.
“En cuanto a la situación, no tenemos ninguna complicación, nos han tratado súper bien y nos han tratado de manera increíble, tanto la Federación de Futbol Americano de Honduras como la embajada de México. Ahorita nos estamos quedando en unos departamentos literalmente de lujo”, mencionó el estratega del equipo.
El problema que implica estar varados en Honduras para los integrantes del equipo es por el tema laboral.
“Creo que todos hemos tratado de resolver esta situación. En algunos de nuestros casos, los jefes entienden que no es nuestra culpa y otros tendrán que ver lo que les van resolviendo”, dijo.
Hasta el momento, un contingente compuesto por 36 personas del equipo se aventuró a regresarse a suelo azteca por vía terrestre; sin embargo, todavía quedan 17 integrantes más en territorio centroamericano.
El plan que tienen, hasta el momento, es regresar a territorio nacional en cuanto se abran las fronteras.
Finalmente se dio el tiempo para felicitar a las jugadoras por el torneo que dieron y aseguró que fue un gran paso para la disciplina en México.
“Se canceló el torneo, pero las chicas hicieron un gran torneo. Poca gente conoce lo que es el futbol americano femenil. Hace unos años fuimos tercer lugar en mundial”, sentenció.
