Un día como hoy, pero de hace siete años, nació una de las escenas que quedaron inmortalizadas en la historia del americanismo: el famoso cabezazo de Moisés Muñoz en la final del Clausura 2013, que significó el tanto que obligó a que el compromiso se extendiera a los tiempos extra.
Cuando parecía que el Cruz Azul rompería la sequía de títulos que lo aqueja hasta la fecha, salió el arquero de las Águilas para romper con todas sus ilusiones.
Corría el minuto 93 del partido, que se encontraba empatado a un gol, pero que en el global La Máquina llevaba la delantera 2-1.
Un tiro de esquina por la punta de la izquierda que fue rematado por Moisés Muñoz y que alcanzó a desviar Alejandro Castro, terminó con el balón en el fondo de la portería que defendía José de Jesús Corona.
A siete años de la mítica escena que significó el título número 11 en la historia de la institución azulcrema, las heridas no han sanado al interior del club cementero, mientras que los de Coapa lo siguen celebrando.
rmp