El campeón defensor del Tour de Francia, Egan Bernal, se retiró de la carrera antes de la etapa reina en Los Alpes, anunció su equipo, Ineos Grenadiers, este miércoles.
El ciclista colombiano atraviesa problemas desde que la ronda gala pasó por el macizo del Jura el pasado fin de semana, donde perdió más de siete minutos con los principales aspirantes y desperdició sus opciones de subir a lo más alto del podio en los Campos Elíseos. Lastrado por dolores de espalda, Bernal, de 23 años, perdió más tiempo el martes durante la primera etapa alpina.
Bernal ocupaba el puesto 16 en la general, a más de 19 minutos del líder, Primoz Roglic.
“Obviamente no es así como quería que terminase mi Tour de Francia, pero estoy de acuerdo con que esta es la decisión correcta para mí en estas circunstancias. Tengo el mayor respeto por esta carrera y ya estoy deseando regresar los próximos años", dijo el originario de Bogotá.
El año pasado, Bernal se convirtió en el primer colombiano en coronarse en el Tour y en el campeón más joven desde la Segunda Guerra Mundial. Ineos Grenadiers dijo que el ciclista tratará de recuperarse lo antes posible y redefinirá sus objetivos para lo que queda de temporada.
“Hemos tomado esta decisión teniendo en cuenta el mejor interés de Egan”, explicó el manager del equipo, Dave Brailsford. “Egan es un auténtico campeón que ama correr, pero también es un deportista joven con muchos Tours por delante", agregó.
La retirada de Bernal supone el final del dominio de Ineos en la carrera más importante del ciclismo. Sus éxitos comenzaron en 2012, cuando era Team Sky, con el triunfo de Bradley Wiggins, El equipo ganó siete de las ocho últimas ediciones con cuatro ciclistas diferentes, pero su mejor opción este año es el ecuatoriano Richard Carapaz, 14 en la general antes de la etapa 17.
La etapa del miércoles es la más dura de todo el recorrido, con ascensos al Col de La Madeleine y al Col de La Loze, el pico más alto de esta edición a 2,304 metros. La carretera entre los centros de esquí de Meribel y Courchevel se abrió a los ciclistas este año luego de que las autoridades locales pavimentaron una pista forestal. Los seis últimos kilómetros de la subida son especialmente difíciles, con rampas pronunciadas y curvas cerradas.
EVG