Estados Unidos evitó el ridículo ante Jamaica, a la que se impuso 3-1 en tiempos extra en la primera semifinal de la Concacaf Nations League, en un juego que perdía desde los 30 segundos y en el que forzó el alargue con un autogol en la última jugada del tiempo regular.
Haji Wright fue el héroe del equipo de las barras y las estrellas con su doblete en el alargue para instalar a los vecinos del norte en su tercera final en el certamen.
Corrían apenas 30 segundos en el juego cuando Greg Leigh puso en ventaja a los Reggae Boyz con un remate de cabeza a quemarropa tras un servicio de Bobby de Cordova-Reid.
Los caribeños se replegaron atrás y le cedieron la iniciativa a los de las barras y las estrellas, que se hicieron de la posesión del esférico, pero no generaron tantas ocasiones tan claras de gol.
Una de las aproximaciones de los estadounidenses fue al minuto 21 con un disparo rechazado de Christian Pulisic; inmediatamente después, al 22’, Malik Tillman estuvo cerca con un remate de cabeza que rozó el travesaño.
El conjunto dirigido por Gregg Berhalter se lanzó al frente desde el segundo tiempo en busca de la igualada y al minuto 57 Giovanni Reyna intentó algo diferente con un tiro fuera del área que fue directo a las manos de Andre Blake.
Los estadounidenses seguían con la posesión de la esférica, pero no encontraban la manera de generar daño en el área jamaiquina.
Fue hasta la última acción del cotejo que Estados Unidos encontró la diana de la igualada al tener a la fortuna de su lado, pues lo hizo gracias al autogol de Cory Burke en un tiro de esquina.
Haji Wright definió con un tiro de zurda en el área al minuto 96 para poner arriba al equipo local.
Jamaica adelantó líneas en el segundo lapso del alargue y al inicio del mismo tuvo una oportunidad por conducto de Kaheim Dixon, quien no le pegó de lleno al balón.
Pero los anfitriones sentenciaron el duelo a su favor al minuto 109 con el segundo gol de la noche de Haji Wright, quien abatió a Andre Blake con un remate de derecha.
EVG