Luis Rubiales fue acusado por la Fiscalía española por agresión sexual y coacciones por besar en los labios a la delantera Jennifer Hermoso sin su consentimiento, tras la final del Mundial Femenil el pasado 20 de agosto en Australia y Nueva Zelanda.
La fiscalía presentó la demanda contra el suspendido presidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF) ante la Audiencia Nacional en Madrid dos días después de que la goleadora del Pachuca lo acusó formalmente de agresión sexual.
La FIFA suspendió a Rubiales el pasado 27 de agosto después de que se rehusó a renunciar a su cargo durante un discurso desafiante, durante una audiencia general de la Federación en la que se caracterizó como una víctima de una “cacería de brujas” por parte de “falsas feministas”.
Rubiales Béjar fue vetado por 90 días mientras que los jueces disciplinarios de la FIFA consideran el caso. El organismo rector del balompié a nivel internacional puede imponer sanciones en individuos que van desde una advertencia, multas o suspensiones.
De acuerdo con una ley aprobada el año pasado que incluye la figura del consentimiento sexual, si se le declara culpable, Rubiales podría enfrentar una multa o una pena de prisión de uno a cuatro años.
En su comunicado, la fiscalía explicó que el entonces máximo mandatario del futbol español podría haber cometido un acto de coacción cuando, según Hermoso, la presionó para que saliera en su defensa inmediatamente después de que estalló el escándalo por su comportamiento.
Rubiales ha insistido en que el beso fue consentido, algo que ha negado la jugadora que desde el año pasado milita en la Liga MX Femenil con el Pachuca.
La fiscalía ha pedido al juez que Rubiales comparezca ante un tribunal para prestar una declaración preliminar.
Si la Audiencia Nacional acepta tramitar el caso, se abrirá una investigación judicial formal, que concluirá con una recomendación de sobreseimiento o con la apertura de un juicio.
Hermoso, de 33 años de edad, juega desde el 2022 para el Pachuca, tras una larga carrera con los clubes de Europa y España, incluyendo el Barcelona, Paris Saint-Germain y Atlético de Madrid. Regresó a la Bella Airosa el jueves de esta semana.
Rubiales, además, enfrenta acciones del gobierno español. El tribunal deportivo inició la semana pasada una investigación para determinar si el exfutbolista abusó de su autoridad al besar a Hermoso Fuentes o si manchó la imagen de España con su conducta. Lo podrían declarar no apto para el cargo por hasta dos años.
Las futbolistas españolas han advertido que no jugarán con La Roja hasta que haya cambios en la federación. El ente rector del balompié español despidió al entrenador Jorge Vilda, pero las jugadoras no han indicado si esto es suficiente.
Estas acusaciones contra Rubiales fueron presentadas al mismo tiempo que la liga femenil de España inicióun paro el primer día de la temporada, después de que fracasaron las conversaciones con la liga sobre sus salarios.