El británico Lewis Hamilton ganó ayer por sexta ocasión el Gran Premio de China, en lo que fue la carrera 1000 en la historia de la Fórmula 1. En el segundo lugar se colocó el finlandés Valtteri Bottas, su coequipero en la escudería Mercedes, quien finalizó líder en Australia en la primera fecha de la temporada.
Es la primera vez en 27 años que dos volantes del mismo equipo hacen el 1-2 en las tres primeras carreras del año. La última ocasión que esta situación ocurriò fue en 1992, cuando lo consiguieron el británico Nigell Mansell y el italiano Riccardo Patrese, quienes formaban parte de la escudería Williams. El buen comienzo de ambos en aquella campaña se reflejó al final de la misma, ya que Mansell se coronó y Patrese finalizó en el segundo escalón.
“Como equipo no esperábamos tener tres 1-2”, reconoció Hamilton al término de la carrera, en conferencia de prensa.
El originario de Stevenage afirmó que tanto Bottas como él han tenido a la fortuna de su lado, particularmente hace un par de semanas, en Bahréin, donde el monegasco Charles Leclerc, de Ferrari, debió ganar, si no hubiera sido por un problema mecánico en las postrimerías de la competición.
“Creo que, hasta el momento estamos cumpliendo con un poquito más de lo esperado”, agregó el piloto de 34 años, quien las otras veces que culminó en la posición de honor en el Circuito Internacional de Shanghái fue en 2008, 2011, 2014, 2015 y 2017. En todas esas ocasiones logró el título mundial al final de la temporada; menos en 2011, cuando se coronó el alemán Sebastian Vettel.
La carrera de ayer se definió en los primeros 30 segundos. Ése fue el tiempo que Hamilton, quien ha conquistado cinco campeonatos del mundo, tardó en tomar la punta mediante su rápido comienzo para llevarse su victoria 75 en 12 años de trayectoria en la categoría reina del automovilismo.
Bottas admitió que había perdido la delantera por salir despacio, mientras Hamilton lo adelantaba en la primera curva para quedarse al frente de las 56 vueltas.
“Creo que perdí en la salida, sinceramente”, comentó. “Es una pena lo de la salida. Son los pequeños detalles, pero es el principio de la temporada... hemos tenido tres fines de semana perfectos por ahora”, subrayó el originario de Nastola.
El alemán Sebastian Vettel, de Ferrari, finalizó en el tercer peldaño, por delante del holandés Max Verstappen (Red Bull) y Leclerc (Ferrari).
Pese a beneficiarse de las órdenes de equipo, Sebastian Vettel no quedó satisfecho con el tercer puesto.
“Estoy contento de estar en el podio. Es duro. Intentamos pegarnos a ellos, pero no pudimos, fueron demasiado rápidos desde el principio”, declaró el alemán en alusión al desempeño de Hamilton y Bottas.
El mexicano Sergio Pérez tuvo su mejor actuación en lo que va del año, luego de quedar en el octavo sitio. En Australia acabó en la posición 13, mientras que en el Gran Premio de Baréin finalizó en el décimo lugar.
Después de tres carreras, Lewis encabeza la clasificación, con 68 unidades.