J.J. Watt pudo haber tenido una presencia aterradora en el campo de fútbol americano, cazando a los quarterbacks rivales con una ferocidad pocas veces vista, particularmente en la década de 2010, con los Texans de Houston.
En contraste, Watt era favorito de los aficionados, con quienes se mostraba amable. Solía lanzar algunos pases desde la línea de banda a los chicos en el graderío antes de los partidos.
Ahora, uno de los mejores jugadores defensivos en la historia de la NFL parece listo para poner fin a su carrera.
Tres veces nombrado por AP el Jugador Defensivo del Año, Watt anunció el martes que se retirará al concluir la campaña. El defensive end de seis pies cinco pulgadas y 288 libras (1,95 metros y 130 kilogramos) publicó en las redes sociales imágenes de su esposa y su bebé Koa.
“Fue el primer partido de Koa en la NFL y mi último partido como local. Mi corazón sólo está lleno de amor y gratitud”, escribió. “Ha sido un absoluto honor y un placer”.
El integrante de la línea defensiva de los Cardinals y su esposa Kealia se convirtieron en padres en octubre.
Watt, de 33 años, figuró entre los mejores jugadores defensivos de la NFL a comienzos de la década de 2010, con los Texans de Houston. Tras una brillante trayectoria colegial con Wisconsin, fue elegido en la primera ronda del Draft de 2011, y lució dominante de 2012 al 15.
daho