El regreso de Roberto Piojo Alvarado al Cruz Azul es uno de los temas más candentes del mercado de fichajes en la Liga MX, pues aunque se mantiene con las Chivas el cuadro cementero quiere repatriarlo y podría hacerlo, pues tienen el 50% de sus derechos federativos.
Una de las principales incógnitas que rodea esta negociación y que podría ser clave para que se haga el fichaje es el monto económico que estaría dispuesto a ofrecer La Máquina para tener de vuelta al Piojo Alvarado.
Medios nacionales y reportes de medios especializados señalan que Cruz Azul podría pagar hasta 20 millones de pesos anuales a Roberto Alvarado, esto debido a que en su última renovación las Chivas le pagarían arriba de 17.5 millones de pesos al año.
La afición celeste se mantiene expectante ante esta posibilidad, y las redes sociales se han inundado de comentarios y especulaciones sobre el futuro del Piojo Alvarado, quien se ha convertido en uno de los mejores jugadores de las Chivas, siendo el referente en el ataque rojiblanco.
Cruz azul blinda a una de sus estrellas
Debido a las especulaciones sobre el interés de Boca Juniors por reforzar su defensa, Gonzalo Piovi, actual zaguero central de Cruz Azul, ha sonado en los rumores de traspasos. Sin embargo, una millonaria cláusula de rescisión impuesta por La Máquina frenó en seco cualquier avance del club argentino.
El defensor sudamericano llegó a la Noria a principios de 2024, procedente de Colón de Argentina, y a pesar de que tuvo una complicada adaptación, se ganó su lugar como titular indiscutible en la tercera línea del cuadro cementero.
Su buen rendimiento llamó la atención del conjunto xeneize, especialmente tras la posible llegada de Fernando Gago como entrenador, quien dirigió a Piovi durante su etapa en Racing Club, donde ambos obtuvieron dos títulos; razón por la cual el técnico busca una nueva oportunidad de trabajar juntos.
A pesar del fuerte interés, la situación financiera es complicada. Según fuentes cercanas a la operación, Cruz Azul blindó a Piovi con una cláusula de rescisión cercana a los 10 millones de dólares, una cifra que resulta excesiva para los estándares del mercado argentino, especialmente para Boca Juniors.
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