El Olimpo no está reservado para cualquiera. En él solamente caben los atletas que dominan a capa y espada su disciplina y ayer escribió su nombre en esa lista el cubano Mijaín López, quien en Tokio 2020 cosechó su cuarto oro consecutivo en Juegos Olímpicos en lucha grecorromana.
López, de 38 años, se adjudicó el anhelado metal dorado después de derrotar 5-0 al georgiano Lakobi Kajaia en la final de la categoría de 130 kilogramos. El isleño ganó su primer oro en la disciplina en Beijing 2008. Luego sumó conquistas en Londres 2012 y Río 2016, con lo que se erige como el atleta de Cuba con más medallas olímpicas doradas, superando así a los boxeadores Teófilo Stevenson y Félix Savón (ambos ganaron tres títulos seguidos en el peso pesado), además del beisbol como deporte de conjunto.
Con la presea áurea obtenida en el Makuhari Messe Hall, el originario de Pinar del Río se puso a la altura del nadador Michael Phelps, el velocista y saltador Carl Lewis y el discóbolo Al Oerter, los tres estadounidenses y los únicos que habían ganado cuatro títulos olímpicos consecutivos en una misma prueba.
Phelps dominó los 200 metros por estilo en Atenas 2004, Beijing 2008, Londres 2012 y Río 2016, periodo en el que también ganó en conjunto los 4x100 m por estilo y los 4x200 m libre. Lewis fue el mejor en salto de longitud en Los Ángeles 1984, Seúl 1988, Barcelona 1992 y Atlanta 1996, mientras que Oerter terminó primero en lanzamiento de disco en Melbourne 1956, Roma 1960, Tokio 1964 y México 1968.
“He trabajado muy duro para llegar a este punto. Poder batir este récord para mí es un gran logro, porque me he enfrentado a los mejores y por eso puedo estar orgulloso”, manifestó López Núñez tras su cuarta consagración olímpica.
El deportista cubano también se unió a la japonesa Kaori Icho como los únicos luchadores en colgarse cuatro oros olímpicos, aunque la asiática los ganó en estilo libre (la lucha grecorromana solamente es en categoría varonil) en Atenas 2004, Beijing 2008, Londres 2012 y Río 2016.
Antes de vencer a Kajai en la disputa por el oro, el caribeño superó 2-0 en semifinales al turco Riza Kayaalp en una reedición de la final olímpica de Río 2016. Kayaalp se llevó el bronce al derrotar al iraní Amin Mirzazadeh por 7-2. Sergey Semenov, del Comité Olímpico Ruso, ganó el otro bronce en disputa, venciendo al chileno Yamani Acosta.
El rey de la lucha grecorromana también ostenta cinco campeonatos mundiales. Momentos después de su victoria en la final, el gladiador recibió una videollamada de felicitación del presidente de su país, Miguel Díaz-Canel.
Al preguntarle respecto a su futuro y acerca de si le gustaría competir en los próximos Juegos Olímpicos de París 2024, Mijaín no lo descartó. “No quiero decir sí o no, pero a todos, les digo: ¡Mijaín está vivo!”, aseveró.
“Para lograr cada resultado tienes que esforzarte, sacrificarte y dejar de hacer muchas cosas para poder lograr otras cosas. Creo que es algo meritorio y solamente hay que disfrutarlo y luchar por lo que uno quiere en la vida”, ahondó Miajín López en alusión a lo que significan sus medallas olímpicas.
Por su parte, su compatriota Luis Orta se alzó con la presea dorada en la misma modalidad de los 60 kg, al derrotar 5-1 al japonés Kenichiro Fumita. Los luchadores que se colgaron el bronce fueron Sergey Emelin, del Comité Olímpico Ruso, y el chino Sailike Walihan.
“Este es un paso muy importante en mi carrera como profesional, también como persona. No tengo palabras para describir lo que estoy sintiendo en este momento”, señaló Orto, quien tiene 26 años de edad.