La NFL se despide de uno de sus últimos estandartes, pues Jason Kelce, centro de los Philadephia Eagles, se retira luego de 13 temporadas y lo hizo luego de caer en la primera ronda de postemporada ante los Tampa Bay Buccaneers.
Kelce, considerado como uno de los mejores centros en la historia del deporte, no pudo contener su emoción y las cámaras captaron al liniero ofensivo salir del terreno de juego entre lágrimas, en el que es el momento más triste de los playoffs hasta el momento.
Según Mike Garafolo, el jugador de los Eagles le informó a sus compañeros de su decisión de retirarse en el vestidor del Raymond James Stadium, aunque no lo compartió con los medios.
La partida de Kelce ya se siente en la liga, pues la NFL compartió en redes sociales una publicación en honor al centro. "Uno de los mejores jugadores y hombres que nuestro juego haya visto jamás. Felicitaciones por una carrera increíble, Jason Kelce", se lee en X, antes Twitter.
Jason, hermano mayor de Travis Kelce, tight end de los Chiefs, estuvo 13 campañas con los Eagles, equipo con el que ganó el Super Bowl LII, además que fue seleccionado 7 veces al Pro Bowl y 6 ocasiones fue All-Pro del primer equipo.
Dentro de Philadelphia también ya resienten la baja de Jason, pues Nick Sirianni, entrenador en jefe de Eagles, se tomó un momento para hablar sobre el retiro del liniero de 36 años.
"Él es muy especial para mí, lo amó. Es uno de los tipos más especiales con los que he estado", dijo el coach luego de perder ante Tampa Bay Buccaneers en la Ronda de Comodines de la NFL.
Los Eagles no pudieron refrendar el título de la NFC y se despidieron con una terrible actuación de todo su equipo, incluyendo al mariscal de campo Jale Hurts, quien al parecer resintió mucho la lesión en el dedo que tuvo en el último juego de temporada regular.
Philadelphia se presentó con 5 derrotas de sus últimos 6 duelos y no se pudieron levantar. Parece que no es el mismo equipo que llegó al Super Bowl pasado, en donde cayeron ante Kansas City.
La presión en el partido estaba del lado de Philadelphia, pues de ser candidatos en el inicio de la campaña para llegar al Super Bowl tuvieron que jugarse su suerte en el Raymond James Stadium, casa de Tampa, y cayeron en la misión de regresar al duelo por el título.
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