Este miércoles en el Tribunal de Magistrados de Westminster se vivió una gran revelación, ya que la hermosa influencer Orla Melissa Sloan se declaró culpable de un cargo de acoso sin violencia y dos de acecho, las víctimas fueron tres jugadores británicos de alto nivel.
Mason Mount, jugador de 24 años del Chelsea, fue el principal objetivo de Melissa Sloan, pero además acosó a Billy Gilmour, del Brighton & Hove Albion, y Ben Chilwell, también del Chelsea.
Orla Melissa, de 22 años de edad, llenó de mensajes de texto y llamadas a los futbolistas ingleses. De acuerdo con el relato contado en el Tribunal todo empezó con mensajes en Instagram entre Chilwell y ella; el jugador la invitó a una fiesta con otros compañeros.
La creadora de contenido, quien cuenta con más de 84 mil seguidores en Instagram, en la fiesta tuvo relaciones con Mason Mount y a raíz del encuentro intercambiaron esporádicos mensajes por redes sociales por seis meses.
"La pareja conversó 'esporádicamente' en Instagram durante seis meses... La relación no iba a progresar", detalló el Daily Star. Sumado a esto, el diario The Sun dijo; "ella bombardeó a Mount con mensajes y cambió su número 21 veces después de que él la bloqueara".
"Ya no compraré comida para poder obtener más números", dijo la joven influencer en el Tribunal de Westminster, además, otra prueba dice: "Debes disculparte o desbloquearás un nuevo personaje: Devil Baby".
Orla Melissa Sloan no se detuvo y comenzó a acosar a Billy Gilmour. "Orla también bombardeó a Gilmour con mensajes y siguió acechando al joven cuando se fue de los Blues a Brighton el verano pasado", dice Daily Star.
La influencer admitió haber acosado a Mason Mount "entre el 19 de junio de 2022 y el 28 de octubre y a Gilmour entre el 10 de septiembre de 2022 y el 28 de octubre. Orla también se declaró culpable de acosar a Chilwell sin violencia entre el 20 y el 29 de octubre", señala el Daily Star.
La sentencia de Orla Melissa Sloan conocerá el 20 de junio. Cabe recordar que la creadora de contenido de 22 años se declaró culpable de acoso a los tres jugadores y de haber cambiado 21 veces de teléfono para poder seguir en contacto con los futbolistas.
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