El futbol en Ucrania regresó después de ocho meses. La Liga Premier de aquel país dio comienzo a su nueva campaña con la condición de que todos los juegos se lleven a cabo sin público en las tribunas y con la presencia de fuerzas armadas.
Sin embargo, las consecuencias de la guerra con Rusia no son ajenas al deporte, pues el partido entre el Rukh Lviv y el Metalist Járkov, correspondiente a la Jornada 1, se vio suspendido en tres ocasiones por amenazas de bombardeo.
Ante este hecho, futbolistas y cuerpos técnicos de ambos clubes, además de los árbitros tuvieron que resguardarse en los búnkeres del estadio donde se jugaba el encuentro frente a la posibilidad de un ataque aéreo.
Por esta situación, el choque duró cuatro horas y media. De acuerdo con información de Mundo Deportivo, los jugadores se protegieron de un posible ataque durante al menos 145 minutos.
La última interrupción se presentó al minuto 88, cuando los jugadores tuvieron que regresar al terreno de juego para disputar los dos minutos que faltaban. La victoria se la llevó el Metalist Kharkiv por marcador de 2-1.
Golpean brutalmente a árbitro en Sudamérica
La violencia en el futbol se hizo presente un vez más, en esta ocasión en el partido entre el Macará y el Aucas en la Primera División del futbol de Ecuador, pues uno de los entrenadores del Macará golpeó brutalmente al árbitro del encuentro.
Héctor Chiriboga, entrenador de porteros del Macará, agredió al juez del cotejo, Alex Cajas, luego de que este pitara un penalti a favor del Aucas en una jugada dudosa que incluso obligó al árbitro a ir al VAR a checar la acción.
Cuando el juez del duelo marcó la pena máxima, el preparador de porteros se acercó a reclamarle y entre los reclamos le soltó un par de golpes a Cajas, quien cayó al suelo, pero pudo recomponerse rápidamente.
Finalmente el partido terminó empatado a un gol, pero la situación con la agresión no quedó ahí, ya que la Federación Ecuatoriana de Futbol (FEF) de manera pública rechazó este tipo de acciones violentas.
EVG