Un mes después de que Lionel Messi le comunicó a la directiva del Barcelona su deseo por marcharse del club (situación que no ocurrió), Josep Maria Bartomeu, presidente de la entidad culé, aseguró este sábado que el equipo no podía darse el lujo de dejar ir al futbolista argentino.
"Yo no podía permitir dejar ir al mejor jugador del mundo. Él habla en el campo como hemos visto, es un tema aparcado. Las cosas hay que hablarlas en casa, hay que dar apoyo al equipo y los jugadores. Está ilusionado con (Ronald) Koeman, lo importante es que juegue en el Barça, en su casa; queremos que se retire en el club y hacer un proyecto con Messi", indicó el directivo en conferencia de prensa.
El pasado 4 de septiembre, el jugador originario de Rosario aseguró en entrevista con Goal que permanecería al menos por un año más en las filas blaugranas, aunque reconoció que sí le había comunicado a la directiva que tenía la intención de irse.
En cuanto a la la cifra de firmas recogidas para una moción de censura entre los socios culés, Bartomeu Floreta descartó que se le haya sugerido dejar su puesto como presidente del cuadro catalán.
"La junta seguirá trabajando para hacer un equipo lo más competitivo posible, ya hablaremos después de la validación. En estos momentos nadie quiere dimitir, ni nadie me ha sugerido que lo haga. El club no se para y sigue trabajando, tenemos muchas cosas pendientes", subrayó.
En cuanto a la posible llegada del holandés Memphis Depay en lugar de Luis Suárez, Bartomeu aseveró que en estos momentos el uruguayo sigue siendo parte del Barça.
"Antes de que lleguen unos deben salir otros". Una vez solucionemos las salidas veremos si hay llegadas", concluyó el mandamás del actual subcampeón de LaLiga de España.
En el terreno deportivo, el Barcelona cerró la pretemporada con un triunfo de 1-0 sobre el Elche en la disputa por el Trofeo Joan Gamper con un tanto del francés Antoine Griezmann. Los dirigidos por Koeman debutan en LaLiga el próximo 27 de septiembre, cuando reciban al Villarreal.
EVG
