Sumida en una crisis por el comportamiento de su expresidente Luis Rubiales en la final de la Copa Mundial femenina, la federación española de futbol perdió el martes la sede de la próxima reunión anual de la UEFA.
Madrid iba a recibir el Congreso de la UEFA 2024, con sus 55 federaciones miembro, el 8 de febrero, además del sorteo de la fase de grupos de la próxima edición de la Liga de Naciones masculina.
El ente rector del futbol europeo informó que su comité ejecutivo decidió trasladar ambos eventos a París en la misma fecha.
Rubiales se encuentra bajo una investigación penal en España luego que la campeona mundial Jenni Hermoso le acusó de agresión sexual por propinarle un beso en los labios durante la ceremonia de premiación el 20 de agosto en Sidney.
Un juez en Madrid fijó una orden de alejamiento de 500 metros para el expresidente y que se abstenga de ponerse en contacto con Hermoso o con su entorno.
Rubiales renunció tres semanas después de la final bajo el asedio de fuertes críticas por parte de legisladores español y las demandas de las jugadoras de la selección por cambios en las estructuras de la federación.
El dirigente también renunció al cargo de vicepresidente de la UEFA por el cual cobraba 250.000 euros (270.000 dólares), más gastos de representación, anualmente.
La UEFA le dio las gracias a Rubiales por su trabajo en el futbol europeo, y su presidente Aleksander Ceferin indicó que imputarle por el beso le parecía “completamente ilógico”.
El albano Armand Duka fue designado el martes por la UEFA para reemplazar a Rubiales como vicepresidente.
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