Robert Saleh insistió que nadie había caído presa del pánico tras el titubeante comienzo de temporada de los Jets de Nueva York y un día después quedó desempleado.
El dueño Woody Johnson tomó el martes la fulminante decisión de despedir a Saleh tras el quinto partido de su cuarta temporada luego que el equipo quedó con marca 2-3 tras una derrota 23-17 ante Minnesota en Londres el domingo.
“Es uno de los equipos más talentosos ensamblados por los Jets de Nueva York”, dijo Johnson durante una teleconferencia. “Quería darle a este equipo la mejor oportunidad para ganar esta temporada. Siento que teníamos que tomar una diferencia diferente y fue lo que hicimos hoy”.
Saleh acabó 20-36 como estratega de los Jets, ávidos de poner fin a la sequía activa más larga de la NFL sin clasificarse a los playoffs, de 13 campañas.
El coordinador defensivo Jeff Ulbrich quedó a cargo como entrenador interino.
“Nos brindará una chispa positiva”, dijo Johnson sobre Ulbrich.
Se trata de la primera vez que en los 25 años que Johnson lleva como propietario del equipo que un entrenador es despedido en medio de la temporada.
La inesperada decisión se tomó un día después que manifestó sentirse confiado que el quarterback Aaron Rodgers y los Jets serán capaces de enderezar el rumbo tras perder dos encuentros en fila. La derrota en Londres ante los invictos Vikings fue el peor partido de Rodgers con Nueva York al ser interceptado tres veces.
“Queda muchísimo por jugar”, dijo Saleh el lunes. “Podemos mejorar en muchas cosas... No caigo en el pánico. Nadie en estas instalaciones está en pánico”.
Pero evidentemente Johnson acabó perdiendo la paciencia con Saleh y decidió hacer un cambio.
Johnson dijo que habló con Rodgers — pero no sobre un posible cambio de entrenador — el lunes. También charló con el gerente general Joe Douglas, pero subrayó que “esta fue mi decisión”.
Se trata de la 12ma ocasión desde 2000 que un equipo cambia de entrenador con apenas cinco partidos o menos en la campaña, y la primera desde que Matt Rhule fue despedido por Carolina al cabo de cinco juegos en 2022.
El quarterback de los Jets de Nueva York Aaron Rodgers sufrió un esguince bajo en el tobillo izquierdo, pero seguramente podrá jugar ante Buffalo el próximo lunes, según informó el entrenador Robert Saleh el lunes pasado, un día antes de que fuera despedido.
Esta lesión hizo recordar el dolor que sintió en el Estadio Metlife cuando sufrió un desgarro en el tendón de Aquiles tras apenas cuatro jugadas en su debut con los Jets el año pasado. El equipo seguirá evaluando a Rodgers, quien también estuvo lidiando con una dolencia en la rodilla izquierda la semana pasada.
Los Jets (2-3) recibirán el próximo lunes a Los Bills (3-2), sus rivales en la División Este de la Conferencia Americana. Nueva York podría saltar al liderato divisional con una victoria. Rodgers, de 40 años, ciertamente se beneficiará del día extra de descanso tras recibir tres capturas y 11 golpes ante los Vikings.
Rodgers tuvo su peor actuación con los Jets, completando 29 de 54 pases.
