Un choque con el finlandés Kimi Raikkonen en la segunda práctica del Gran Premio de La Toscana fue el motivo por el que la Fórmula 1 sancionó con un puesto en la parrilla al mexicano Sergio Pérez.
Todo ocurrió cuando Checo salió de boxes y se llevó puesto al piloto de Mercedes, provocando así una colisión y la posterior bandera roja debido a varios trozos de fibra de carbono que quedaron sobre el asfalto.
De esta manera, independientemente del desempeño del tapatío el sábado en la clasificación en el Autódromo Internacional del Mugello, se retrasará una posición su salida en la novena carrera de la temporada, lo que significa, por ejemplo, que si en la Qualy finaliza sexto largará séptimo.
"El piloto del auto #11 fue advertido por su equipo de la aproximación del auto #7 (Raikkonen) y del auto #23 cuando salía de la salida de boxes. Había una bandera azul ondeando antes de la curva 1 y era evidente que vio el coche “7 en sus espejos", argumentaron los comisarios acerca del hecho.
"Fue una pena haber tenido la colisión con Kimi (Raikkonen). Es muy difícil ver otro coche cuando sales del pit lane y el ángulo para volver a entrar en la pista también es complicado. Sabía que estaba cerca, pero es muy difícil juzgar la distancia entre los autos y tristemente no pude evitarlo; simplemente muestra que este fin de semana va a ser complicado", comentó por su parte Checo.
El pasado domingo, el jalisciense arrancó en la cuarta posición el Gran Premio de Italia, carrera en la que sumó un punto después de finalizar en el décimo peldaño.
EVG
