Harry Kane tendrá que tomar una decisión trascendental para su carrera. El capitán inglés deberá definir si se queda en el Tottenham, el club inglés en el que ha jugado desde 2004, o irse al gigante alemán Bayern Múnich.
Los clubes habrían alcanzado un acuerdo sobre la transferencia del delantero, una operación que superaría los 110 millones de dólares. Kane tiene la última palabra.
Ninguno de los clubes se ha pronunciado oficialmente sobre un acuerdo por Kane. Tottenham ha dicho previamente que Kane no estaba en venta, pero mantuvo negociaciones con el Bayern en las últimas semanas.
Kane, segundo máximo goleador en la historia de la Liga Premier con 213 tantos, entra al último año de su contrato con los Spurs y puede marcharse como agente libre en 2014. Ello pone contra la pared a Tottenham, sin otro remedio que venderle este verano si quiere embolsar algo de dinero por su máxima estrella.
Con Mauricio Pochettino como técnico del Tottenham, Kane alcanzó la final de la Liga de Campeones en 2019, sucumbiendo ante el Liverpool. Pero no ha ganado un título con el club de Londres y él mismo se ha desmejorado en años recientes. Quedaron octavos en la Premier la pasada temporada, dejándoles fuera de las copas europeas.
Tres veces máximo goleador de la Premier, Kane podría ser clave para revitalizar a un Bayern, que echó de menos a un delantero centro la pasada temporada tras la salida Robert Lewandowski al Barcelona.
Una mejor diferencia de goles fue el fiel de la balanza para que el Bayern superase al Borussia Dortmund para conquistar el título alemán en el último día de la campaña. Su máximo anotador fue Serge Gnabry, autor de 14 goles. Dos años atrás, Lewandowski fijó un récord de 41 goles.
