EU, en la cima otra vez

Tokio 2020, un símbolo de superación

La justa veraniega representó la esperanza deportiva, al disputarse, luego de que fuera cancelada el año pasado; México termina con cuatro preseas de bronce

Naomi Osaka fue la encargada de prender el pebetero olímpico.
Naomi Osaka fue la encargada de prender el pebetero olímpico. Foto: Reuters

El 2021 quedará marcado en la historia como el año de la superación. Ante las adversidades causadas por la pandemia del Covid-19, los eventos deportivos lograron salir a flote, contra todo pronóstico. El más importante: los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Entre un mar de dudas, e incluso protestas de la población japonesa, en julio pasado se disputó la máxima fiesta del olimpismo internacional, en una emotiva justa, en la que la salud mental se robó los reflectores.

México tuvo una de las delegaciones más grandes en su historia, con 162 atletas que dejaron corazón y sudor sobre tierras niponas, pero que sólo consiguieron cuatro preseas, todas ellas de bronce.

Varios atletas se quedaron cerca de darle a la delegación tricolor un metal más. En total fueron siete las pruebas en las que se terminó en el cuarto puesto, en lo que se convirtió en una constante en los Juegos Olímpicos del “ya merito”.

Como era de esperarse, el tiro con arco y los clavados no fallaron en los pronósticos y en cada una se consiguió una medalla. Alejandra Valencia y Luis Álvarez terminaron en el tercer puesto de la categoría mixta en la prueba de puntería, mientras que en la fosa, Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez se colgaron el bronce.

Luego de varios días sin metales y con los cuartos lugares al por mayor, llegó el primer rayo de esperanza, con Aremi Fuentes, quien tuvo una excelsa demostración en la halterofilia. Esa actuación le valió, además, para conseguir el Premio Nacional del Deporte 2021.

Gráfico
Gráfico ı Foto: larazondemexico

Aremi fue una de las sorpresas en los Juegos Olímpicos, pues no estaba catalogada entre las medallas que se esperaban. La chiapaneca levantó 245 kilogramos entre las modalidades de arranque y cargada y envión.

Pese a que no es un deporte amateur, el futbol también brilló en Tokio 2020. Jaime Lozano y sus pupilos consiguieron la última medalla que cayó para la delegación tricolor, al derrotar a Japón, en el duelo por el tercer lugar.

Estados Unidos volvió a mostrar su poderío y terminó en la cima del medallero, con un total de 113 preseas: 39 oros, 41 platas y 33 bronces; quedaron por encima de naciones como China, Rusia (Comité Olímpico Ruso) y los anfitriones, Japón.

Simone Biles mostró las verdaderas prioridades, al rechazar participar en varias pruebas de la gimnasia, para cuidar su salud mental.

Al igual que la tenista Naomi Osaka, quien fue la encargada de prender el pebetero olímpico y quien en días antes había hablado del mismo tema, Biles se robó los reflectores y puso bajo la lupa la realidad que viven los atletas, más allá de las glorias y los lujos.

Al final, la estadounidense sólo se llevó una presea individual, con un bronce en la viga de equilibrio.

Nuevas promesas se hicieron notar. Ante la ausencia de Michael Phelps y Usain Bolt, surgieron las estrellas del futuro en Juegos Olímpicos.

Es probable que haya sido el último baile para varios atletas más como Emma Mckeon, quien a sus 37 años se las arregló para ganar siete preseas en Tokio; sin embargo, el futuro luce prometedor para el olimpismo internacional.

La esperanza está puesta en París 2024. Poco más de dos años para volver a ver el fuego olímpico y, en el mejor de los casos, a aficionados en las tribunas de los complejos deportivos, alentando a los deportistas de sus naciones.

El 2021 sirvió como un aliciente ante un 2020 que estuvo lleno de dolor. Un año que será recordado por su atipicidad, pero también por ser el año de la superación.

  • El dato: Los Juegos Olímpicos de París son los que siguen en la lista de organizadores y serán los primeros en la historia que se disputarán tres años después de los anteriores.