Diego Cocca lleva menos de seis meses en el cargo, pero quizás el momento más importante de su gestión como técnico de México ha llegado muy pronto.
El entrenador argentino buscará el jueves que México rompa una mala racha, pues desde 2019 no puede vencer a Estados Unidos. Salir airoso en el estadio Allegiant de Las Vegas instalará al Tri en la final de la Liga de Naciones de la Concacaf.
En febrero, Cocca asumió en el relevo de su compatriota Gerardo Martino, pero lo visto no ha sido deslumbrante, aunque ahora los resultados sí tienen que ser inmediatos y no le van a dar tiempo para fracasar ante el cuadro de las Barras y las Estrellas, que ya tiene medido al Tricolor y podría acumular un partido más sin conocer la derrota ante los verdes.
Se consiguieron victorias frente a Surinam y Guatemala, una igualdad en casa ante Jamaica y luego otros dos empates en amistosos frente a Estados Unidos y Camerún.
“Para nosotros no hay amistosos, son todos (partidos) importantes. Amistoso es en el barrio con los amigos. Acá no. Es por prestigio y lo estamos haciendo valer mucho”, dijo Cocca.
El prestigio de México quedó golpeado luego de naufragar en la primera ronda de la Copa Mundial de Qatar 2022, algo que no ocurría en un campeonato mundial desde Argentina 1978.
Estados Unidos afronta el partido con B.J. Callaghan como su segundo entrenador interino desde que Greg Berhalter dejó el cargo en diciembre tras llevarles a los octavos de final del Mundial. Anthony Hudson, el primer relevo, renunció al cargo a principios del mes.
La otra novedad de Estados Unidos será el debut internacional del delantero Folarin Balogun, quien viene de una temporada en la que anotó 21 goles para el club francés Balogun. El atacante de 21 años decidió representar a Estados Unidos a nivel de selecciones cuando también tenía a Inglaterra y Nigeria como opciones.
Cocca mantuvo la base de jugadores que fue al torneo de Qatar, pero modificó el esquema táctico para usar un 5-3-2. Martino apeló a un 4-3-3 durante toda su gestión, salvo una línea de cinco defensores en el partido ante Argentina en la fase de grupos del Mundial.
El 5-3-2 fue la formación de Cocca para ganar un bicampeonato doméstico con Atlas, pero ha dicho que ha tenido poco tiempo para trabajar ese nuevo sistema. Esta semana, con equipo completo, ha realizado dobles sesiones para tratar de que los jugadores la manejen mejor.
“Estamos dándoles herramientas que los jugadores puedan utilizar y preparando la táctica, la estrategia”, dijo Cocca.
El partido ante Estados Unidos ha adquirido más relevancia debido a que México no derrota a su acérrimo oponente regional desde septiembre del 2019.
“Sabemos cómo es el futbol en México, sabemos que la presión existe y lo que se juega nos motiva mucho”, dijo el volante Luis Romo, seleccionado en Qatar. “Tenemos que darle respaldo al cuerpo técnico. Ante Estados Unidos no podemos perder. Así lo vemos nosotros”.
Aunque una derrota no necesariamente implicaría el cese de Cocca, otro revés si añadiría presión a su mandato que inició sin el apoyo de un gran número de hinchas que preferían a Miguel Herrera o al uruguayo Guillermo Almada en el banquillo.
Adicionalmente, Cocca fue elegido por un consejo de selecciones nacionales que fue disuelto por el nuevo comisionado del futbol mexicano, Juan Carlos Rodríguez.
El nuevo presidente ejecutivo de la Federación Mexicana, Ivar Sisniega, dijo que apuestan por la continuidad de Cocca, pero eso dependerá de los resultados de la Liga de Naciones y en la Copa de Oro.
Callaghan, quien trabajó cuatro años como asistente en la selección absoluta, inicialmente fue nombrado para dirigir en los torneos de la Concacaf mientras se designa al entrenador permanente.
“Juntos hemos construido una gran cultura con gran entendimiento de cómo queremos jugar, esperamos seguir construyendo en ese progreso”, dijo Callaghan. “La meta es clara: defender nuestros dos títulos de la Concacaf”.
Si Callaghan y EU logran esa meta, Cocca probablemente tenga que comenzar a buscar empleo.
