Cubano de nacimiento, mexicano gracias al box

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Foto: larazondemexico

El mundo del box está de luto. El legendario pugilista cubano, naturalizado mexicano, José Ángel Nápoles falleció a los 79 años de edad, tras padecer diabetes y principios de Alzheimer.

El Mantequilla, como era conocido por su manera de boxear desde muy joven, nació el 13 de abril de 1940 en Santiago de Cuba y llegó a México en 1961, país en donde vivió sus mejores años arriba y abajo del ring. Nápoles tuvo que abandonar la isla tras la llegada de Fidel Castro al poder.

“Al parecer porque la mantequilla resbala y yo era un boxeador que en situaciones de peligro me escapaba de los rivales con movimientos rápidos”, declaró el pugilista en diferentes entrevistas que le realizaron a lo largo de su trayectoria.

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El presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Mauricio Sulaimán, a través de sus redes sociales dio a conocer el fallecimiento de quien fuera campeón welter del CMB y de la AMB.

“Mantequilla Nápoles ya es campeón para la eternidad. Se nos fue el gran campeón, pero lo hizo de manera digna y con el amor de sus hijos, quienes cuidaron de él. Descanse en paz mi gran ídolo, compadre de mi papá, mexicano de corazón, aunque cubano de nacimiento. Adiós, mi campeón”, escribió Sulaimán Saldívar.

El boxeador tuvo ocho peleas profesionales antes de mudarse a la Ciudad de México; a su llegada se puso a las órdenes de Cuco Conde y Kid Rapidez para convertirse en un exitoso peleador de peso ligero.

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El 18 de abril de 1969 se proclamó campeón de peso wélter tras vencer en el Forum de Inglewood, California, a Curtis Cokes. El cubano se llevó el combate después de 13 episodios ya que su rival no se pudo levantar, por lo que ganó la pelea gracias a un nocaut técnico.

Esa noche será recordada para todos los fanáticos del boxeo y, sobre todo, del Mantequilla Nápoles, quien en su momento contó que el Presidente de México en aquel entonces, Gustavo Díaz Ordaz, le marcó para ofrecerle un regalo.

“Mantequilla estoy muy orgulloso de ti ¿qué quieres que te regale?, ¿un coche?, te puedo regalar un carro, ¿dinero?, te puedo regalar un reloj de oro”, le dijo.

Para sorpresa de todos, Nápoles respondió: “nada de eso señor Presidente, yo sólo quiero ser mexicano” y  24 horas después, José Ángel Nápoles obtuvo la nacionalidad.

De inmediato el estadounidense, Curtis Cokes, recibió la revancha, pero para su mala fortuna, el final fue el mismo, pues el 29 de julio en la Ciudad de México, como sede, se tuvo que detener el combate en el décimo round y finalizar la pelea a favor de Nápoles.

Hizo tres defensas antes de perder los cetros con Billy Backus el 3 de diciembre de 1970, ante quien los recuperó seis meses después, para luego hacer nueve defensas de ambos y una más del verde y oro.

Otro de sus combates más recordados fue contra el argentino Carlos Monzón, mandamás en los medianos; para dicha pelea, la cual se celebró en Francia el 9 de febrero de 1974, Nápoles tuvo que subir de categoría y eso le pasó factura, ya que tuvo que abandonar el combate en el sexto asalto y el pampero se alzó con el triunfo. El cubano-mexicano señaló que el sudamericano le metió el dedo pulgar en el ojo y, por lo mismo, decidió retirarse, pero el réferi desmintió lo contado por José Ángel. Dicha pelea le sirvió al escritor Julio Cortázar para inspirarse y realizar el libro La noche del Mantequilla.

Su última pelea fue el 6 de diciembre de 1975 en la Plaza México, con una derrota ante John Stracey, para irse con récord profesional de 81-7, 54 por la vía del cloroformo.

En 1984, Nápoles fue ingresado al Salón de la Fama del Boxeo y en 1990 al Salón Internacional de la Fama del Boxeo.

[caption id="attachment_984621" align="alignnone" width="1280"] Foto: Especial[/caption]

Otro de sus más grandes éxitos fue el de participar en una película a lado del luchador El Santo, el enmascarado de plata, titulada Santo y Mantequilla Nápoles en la Venganza de La Llorona.

“Lamento el fallecimiento del gran campeón José Ángel Mantequilla Nápoles. Mi más sentido pésame a su familia y al gremio boxístico!”, publicó El Hijo del Santo en su cuenta oficial de Twitter.

Antes de fallecer, la esposa del Mantequilla Nápoles afirmó en diversas entrevistas que el CMB le brindó todo el apoyo necesario y en ocasiones se realizaron eventos especiales para juntar dinero y apoyar al pugilista.

“Muchas veces yo he llorado de desesperación, porque hay ocasiones en que no sé cómo tratarlo, cómo proceder, porque se acumula el cansancio y el estrés, la depresión; él no se percata de eso, pero es bastante duro. La comisión de box y el señor (Mauricio) Sulaimán nos están apoyando con el tema médico y las medicinas, en ese sentido no tenemos muchos problemas”, concluyó.

Mediante un comunicado de prensa el CMB mandó sus condolencias a la familia del boxeador.

“El Consejo Mundial de Boxeo está de luto por la partida de uno de los mejores pesos wélter de todos los tiempos y una de las personas más queridas en este deporte. ¡Descansa en paz campeón!”, se puede leer en el boletín.

Por último, Mauricio Sulaimán reveló que Nápoles fue velado ayer a las 22:00 horas en el velatorio García López, en la calle de General Prim.

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