Los Bravos de Atlanta no se achicaron en el Minute Maid Park y derrotaron por paliza de 0-7 a los Astros de Houston para coronarse en el sexto juego de la Serie Mundial y así convertirse en los nuevos campeones de la MLB.
Jorge Soler pegó un cuadrangular de tres carreras apenas en la tercera entrada para darle una cómoda ventaja a los Bravos. Una ventaja que nunca más perdieron.
El pitcheo de los Braves fue excelso. Max Fried lanzó seis entradas completas en las que no permitió ni una carrera y ponchó a seis rivales, pese a recibir cuatro imparables.
La ofensiva de los Astros lució inoperante durante todo el juego. Yordan Álvarez, quien fue el MVP de la Serie de Campeonato de la Liga Americana bateó su segundo hit de todo el Clásico de Otoño, en un claro reflejo de lo que la novena texana en toda la Serie Mundial.
El pitcheo, como en toda la temporada, fue deficiente. Luis García fue el abridor y permitió dos hits y tres carreras, en sólo dos entradas y dos tercios.
El relevo no fue mucho mejor. Cristian Javier permitió dos carreras, mientras que Ryne Stanek y Blake Taylor recibieron una carrera más, cada uno.
BRAVOS VUELVE A SER CAMPEÓN, LUEGO DE 26 AÑOS
Éste es el segundo título de los Braves en Atlanta, aunque anteriormente ya habían conseguido títulos, cuando militaban en Boston (1914) y en Milwaukee (1957).
Los Braves no eran campeones desde su época dorada en la década de 1990, cuando alcanzaron el Clásico de Otoño en cuatro ocasiones, aunque sólo ganaron en 1995, ante los Cleveland Indians.
RMP