Aun con un escenario lleno de incertidumbre debido a la pandemia de Covid, lo que ha modificado formas de producción, distribución y exhibición, el cine sigue y en este año nos ha dejado una buena cantidad de títulos a destacar. Aquí un puñado de ellos a los que bien vale la pena salir al encuentro.
Dune
Director: Denis Villeneuve
Un impresionante ejercicio de síntesis visual, que convierte la palabra escrita en pasajes profundos y de enorme belleza, para dejar más que satisfechos a quienes ya habían leído la novela original. Además de no arruinar la experiencia de quien la desconocía y después de ver esta adaptación se acercarán a ella por primera vez. Una épica espacial en la línea de la ciencia ficción más tradicional, esa que siempre va acompañada de un discurso filosófico existencial de fondo, en este caso sobre la manipulación a través de las posturas políticas y los dogmas religiosos.
Los lobos
Director: Samuel Kishi
Un entrañable relato sobre la complicidad entre madre e hijos y la empatía que aún existe en el mundo, a pesar de lo hostil de las circunstancias que viven. El eje de la trama es la necesidad de migrar a Estados Unidos para tener una mejor vida. El encanto de la simplicidad en esta película cede el protagonismo a los sentimientos y guiños animados que reflejan el ensueño infantil de los dos menores protagonistas, pero anclado a la realidad a través de breves apuntes documentales. No sólo es una de las mejores películas mexicanas en este año, sino en mucho tiempo.
Annette
Director: Leos Carax
Extravagante ficción que seduce e incomoda, la cual aborda la relación de amor-odio que establecen el público y las celebridades que al final terminan reducidas a un producto, víctimas tanto de sus vicios como de la idolatría que les profesan. Sorprende la forma en que el director francés Leos Carax, ovacionado en el Festival de Cannes, va y viene entre la grandilocuencia de la ópera y el dinamismo más simple del musical, reinterpretando las convenciones teatrales a través de la pantalla, para hacer evidente el juego y dejar en carne viva un drama truculento.
Lamb
Director: Valdimar Jóhannsson
Con un minucioso manejo del lenguaje cinematográfico se trata de una escabrosa exposición sobre los insólitos caminos a los que a veces recorre el ser humano a la hora de buscar satisfacer sus necesidades, y de compensar carencias emocionales, incluso yendo contra la propia naturaleza de los seres. Un drama del cineasta islandés Valdimar Jóhannsson, tipo fábula oscura, que cuestiona los modelos de familia, tan emotivo como perturbador. Después de obtener el Premio a Mejor Película en Sitges, el filme de terror llegará el próximo 30 de diciembre a cines de México.
Amor sin barreras
Director: Steven Spielberg
El adagio dice “Nunca hagas un remake de una buena película”, al cual debería agregarse “a menos que seas Martin Scorsese o Steven
Spielberg”, quienes si algo han demostrado es que son capaces de tomarse esas libertades y hacerlo de maravilla. El segundo lo logra con este filme, donde su acostumbrado estilo de ir tras la acción dando la sensación de encontrarla de manera casual, le permite mantener el espíritu orgánico del relato detrás de una casi obsesiva estilización, mientras contextualiza sobre la gentrificación.
Noche de fuego
Directora: Tatiana Huezo
Aunque el evocador sello visual de la realizadora Tatiana Huezo, aquí luce un tanto contenido por la corrección técnica, la abrumadora naturalidad de los diálogos en perfecta conjunción con el devastador testimonio, hilvanado con miradas furtivas para dimensionar los dos bandos entre los que están atrapadas las protagonistas, hacen que este salto del documental a la ficción por parte de la cineasta, sea no sólo afortunado, sino brillante para mostrarnos lo que viven las mujeres en entidades donde el narco ha llegado.
La cumbre de los dioses
Director: Patrick Imbert
Los procesos internos de aquellos que se dejan llevar por el afán de alcanzar la cima de las montañas más altas, aquí toman forma en pasajes animados de un lirismo irresistible, con fondos pintados y una narrativa íntimamente ligada a los acordes de la banda sonora, donde los silencios reclaman el protagonismo en el momento más oportuno. Fascinante adaptación de un manga. La animación francesa, que casi se acerca al documental se puede ver actualmente en la pantalla de Netflix.
El último duelo
Director: Ridley Scott
Teniendo como base un hecho que más bien podría haberse quedado en lo anecdótico, el célebre director de Blade runner (1982) y Alien (1979) va delineando sin piedad los roles de los implicados en una trama que deja al descubierto una vez más el verdadero rostro de las infames instituciones políticas y religiosas que han normalizado el abuso contra la mujer. Un drama intenso a nivel emocional y en su discurso. Todo con un sólido desarrollo que equilibra los alcances técnicos actuales con un acabado artístico.
El poder del Perro
Directora: Jane Campion
La clara alevosía con la que la realizadora de El piano (1993) hace evidente cada uno de los elementos que integran la receta, dejando que el mustio desarrollo vaya dotándoles de sentido, hacen de esta disección del western una vuelta a la experiencia cinematográfica en su estado más puro, para hablarnos de lazos fraternales retorcidos y la furia reprimida, con parajes montañosos como marco y reflejo, tan peligrosos como protectores. Es una adaptación de la novela homónima de Thomas Savage, de 1967.
La voz humana
Director: Pedro Almodóvar
El sadismo con el que el cineasta español suele diseccionar las capas emocionales, así como el truculento descaro con el que da sentido a los excesos, encuentra uno de sus puntos más depurados al adentrarse en las profundidades de la obsesión y su lucha constante por mantener una fachada de lucidez. Todo aludiendo a códigos teatrales que hacen evidente el artificio detrás de la ficción, convirtiendo al espectador en testigo y partícipe de los espasmos emocionales en esta adaptación del monólogo de Jean Cocteaut.