Joy Division y New Order son grupos con muchos fans en nuestro país, esto quedó claro una vez más cuando Peter Hook, exintegrante de ambos, llegó acompañado de su agrupación para tocar en el Pabellón Oeste del Palacio de los Deportes la noche del jueves 29 de agosto. La lluvia y el frío resultaron ideales para darle cierta atmósfera melancólica a una velada engalanada por temas que ya son clásicos fundamentales del rock, especialmente del llamado rock alternativo.
Con la característica puntualidad inglesa, la banda salió al escenario a las 21:00 horas, tal como estaba anunciado. Las primeras notas de “Hurt” marcaron el inicio de un setlist compuesto por covers de New Order, un Peter Hook con mucha actitud saludó al público en perfecto español con un “buenas noches, ¿están bien?” antes de comenzar la celebración sonora y en medio de los gritos de emoción de los asistentes en un foro que lucía casi lleno.
Al terminar “Touched by the Hand of God” comenzó a sonar “Crystal”, que fue una de las canciones más cantadas de la noche por los fans, quienes además no paraban de moverse al ritmo seductor de la misma. Posteriormente, con “Ceremony” los presentes coreaban una y otra vez “ooo” mientras que Hook se lucía tocando el bajo, demostrando que a sus 68 años de edad todavía tiene mucho para dar y la energía suficiente para emocionar a miles en un concierto.
“Temptation” y “Blue Monday” fueron interpretadas una seguida de la otra en un doble combo que llevó las emociones a un nivel más, la primera recordó a muchos la película Trainspotting por ser parte de su maravilloso soundtrack y la segunda hizo sentir al público como en un club de la Inglaterra de los años 80; ambas pusieron a bailar a todos. “Thieves Like Us”, “The Perfect Kiss” y “State of the Nation”, entre otros temas, también sonaron; “Bizarre Love Triangle” y “True Faith” marcaron el final de la parte dedicada a New Order, la cual fue marcada esencialmente por ritmos de música dance, synth pop y new wave.
Después de un breve intermedio, la música siguió con un setlist integrado por canciones de Joy Division, dando inicio con “No Love Lost” y una marcada mayor intensidad en el sonido en comparación a lo que se tocó en la primera parte de la presentación. Después, la caótica “New Dawn Fades” funcionó como preludio a “Novelty”, con la cual subió la velocidad en las notas y se sintió una mayor energía en el ambiente, haciendo que algunos comenzaran a saltar más, algo que se repitió y escaló en “Disorder” y “Warsaw”.
Con canciones más cortas y de una base rítmica esencialmente punk, la agrupación cambió por completo el tono de una velada que inició inclinándose más a lo bailable para luego adentrarse en la oscuridad de un sonido más crudo y enmarcado por letras desalentadoras. Al acabar “Leaders of Men” el público se mantuvo coreando “ee eao” en repetidas ocasiones durante “Digital” y Hooky (apodo de Peter Hook) aprovechó el momento para dirigir a quienes coreaban como si se tratase de un director de orquesta guiando a sus músicos.
En “Autosuggestion”, la tranquilidad de su sonido hipnotizante se mezcló con momentos de intensidad, para darle paso a una triple dosis de puro poder sonoro a cargo de “Transmission”, “She’s Lost Control” y “Shadowplay”, temas en los que la emotividad se hizo presente junto a la clara emoción de los fans. “Dead Souls” y “Atmosphere” fueron el preámbulo para un final épico que llegó con la infaltable “Love Will Tear Us Apart”, himno del post-punk que puso a cantar absolutamente a todos, en lo que resultó en cierta forma como un homenaje al fallecido líder de Joy Division: Ian Curtis.
Con 30 temas, Peter Hook and The Light ofrecieron una noche digna de recordar por mucho tiempo.