Lotería del miedo, un proyecto artivista

En 2021, Natalia Stengel y Celia de Hoyos lanzaron un proyecto en el que cambiaron las tarjetas del tradicional juego mexicano por imágenes de los principales temores que hoy sienten las mujeres: "El feminicidio", "Que pasen mi pack", "La calle solitaria", "El jefe abusivo", entre otros. Luego convocaron a ilustradoras e ilustradores que sumaron su trabajo creativo: así generaron una herramienta que ayuda a romper el pacto de silencio que rodea muchas formas de agresión y muestra potencial para desafiar las masculinidades tóxicas.

LOTERÍA DEL MIEDO
LOTERÍA DEL MIEDO Fuente de todas las imágenes: Cortesía de Natalia Stengel, Lotería del Miedo, Creative Commons 4.0

“Juntas quemamos el pacto de silencio

ante tanto abuso y opresión.

Juntas quemamos el miedo.”

Colectivo LasTesis, Quemar el miedo

Una voz grita: "¡La cobija de los pobres!”. Con emoción buscas entre las dieciséis imágenes de tu cartón la icónica imagen del Sol, para poner el primer frijolito sobre ese rostro colorado, de rayos luminosos. Sabes que lo tienes porque has revisado bien tu tablero antes de iniciar el juego. La Sirena, El Borracho, La Mano, La Garza… una a una se van cantando las cartas de la tradicional lotería mexicana. Con discreción, echas miradas a las tablas de tus contrincantes para calcular tus posibilidades de ganar, pues esperas gritar antes que nadie: "¡Lotería!".

NO TODAS LAS VERSIONES del juego mexicano que desde hace más de doscientos años nos reúne en familia y con amigos son divertidas: algunas atemorizan y estremecen, como lo sabe Tessie Hutchinson, personaje del cuento "La lotería", de Shirley Jackson, y también Celia de Hoyos y Natalia Stengel, aunque por motivos diferentes.

El Secuestro
El Secuestro

En 2021, De Hoyos, arquitecta, y Stengel, doctora en Estudios Latinoamericanos, deseaban unirse a las protestas feministas en México, pero se encontraban realizando estudios en el extranjero. Les preocupaba que fuera criminalizada toda manifestación que buscaba visibilizar la violencia y la vulnerabilidad que atravesamos y que continúa en ascenso; también les era motivo de inquietud la negación y el menosprecio de las sutiles formas de violencia que aquejan tanto a mujeres como a niñas, las cuales se reproducen en formas cada vez más virulentas. Decidieron entonces coordinar un proyecto en el que retomaron este juego inscrito en nuestra tradición, en el que reconocieron ciertas construcciones machistas. Propusieron una versión feminista de la lotería mexicana, en la que los pictogramas recogen formas de miedo que las mujeres experimentamos. Para conocer los temores más recurrentes realizaron una encuesta conforme a una metodología precisa y luego convocaron a ilustradores que desearan donar su trabajo para la causa, a fin de plasmar cada miedo en una imagen poderosa. Les tomó casi siete meses conseguirlo: a la Lotería del Miedo se sumaron veintitrés ilustradoras, diseñadoras y apasionadas mexicanas y mexicanos.

Esta idea original de Stengel fue trabajada con Celia de Hoyos y luego con Cerrucha en el taller Arte: Arma de construcción masiva. Cuestionaron de qué modo aterrizar las ideas, hacer alianzas, responsabilizarse de lo que sentían. Como resultado de este esfuerzo plural reunieron 58 imágenes con estilos variados: "El feminicidio", "Que pasen mi pack", "La calle solitaria", "El jefe abusivo", "El acosador", "El machito: ésas no son formas", "La triple jornada laboral", "La violencia obstétrica", entre otras.

“EL PROYECTO ARTÍSTICO detrás de la Lotería es también una forma de promover y visibilizar el trabajo de artistas comprometidas y comprometidos”, refiere Natalia Stengel. En esta iniciativa, de corte eminentemente feminista, nunca se excluyó la participación masculina. De acuerdo con Stengel, cuando abrieron la convocatoria también hubo hombres sensibles que se apuntaron a contribuir con el proyecto: “Fue una forma muy sutil de participar de modo explícito como aliados, que además les sirvió para preguntar y estudiar sobre estos temas”. Cada artista eligió qué miedo ilustrar y aunque los motivos detrás de esas elecciones no se externalizaron, Stengel comenta que en determinados casos algunas mujeres ilustradoras sí habían experimentado en carne propia el miedo que decidieron trabajar. En otros casos la opción obedeció a que alguna mujer cercana a ellas atravesaba o había vivido esa situación y querían hacer algo, aunque fuera simbólico; otros eligieron ilustrar determinado temor por interés teórico.

La Lotería es, sobre todo, un medio para que las mujeres puedan protestar sin correr el riesgo de que su reclamo sea criminalizado , explica Stengel

Se trata de un proyecto para promover espacios seguros, a fin de que las mujeres expliquen por qué sienten temor. “La Lotería es, sobre todo, un medio para que las mujeres puedan protestar sin correr el riesgo de que su reclamo sea criminalizado. Pero mi interés es usarla para comprender qué factores perfilan a la población femenina a experimentar miedo; la veo como una herramienta de investigación cualitativa”, explica Stengel, quien desde 2011 se ha dedicado a estudiar la violencia contra las mujeres. “Empecé por explorar la forma de trata de personas en el estado de Querétaro, luego analicé los feminicidios. Sin embargo, me di cuenta de que necesitaba involucrarme más con las poblaciones, aprender a escuchar y estar cerca de ellas. Entonces, gracias a la influencia de Mónica Mayer, Lorena Wolffer y Cerrucha, comencé a explorar la posibilidad de hacer proyectos de intervención artística, de promover otro tipo de arte público que sea por y para la gente, como dice Suzanne Lacy”, apunta.

"La discriminación de género"
"La discriminación de género"

Por su parte, Celia de Hoyos, la cocoordinadora del proyecto artivista, es una arquitecta apasionada por el interiorismo, disciplina que explorará en su maestría en arquitectura de interiores en Arizona State University. Vivir en el Estado de México fue un factor que incidió en De Hoyos, por los altos índices de violencia contra las mujeres en esa entidad. Se convenció de que para que el interiorismo pueda mejorar la calidad de vida las personas, también es necesario involucrarse con las comunidades y fomentar una mejoría social que pueda aprovechar el potencial de la disciplina que es su pasión. Para ella, la Lotería del Miedo representa, por una parte, una forma de ser solidaria con las mujeres con las que creció y quienes experimentaron distintas formas de violencia y, por la otra, un modo de canalizar su creatividad. La principal labor de Celia de Hoyos en el proyecto fue contactar artistas y gestionar colaboraciones. “Sus habilidades sociales y conciliadoras son la columna vertebral del proyecto” reconoce Stengel, quien recientemente fue nombrada por unanimidad como Investigadora y Profesora Asociada en Estudios Españoles, Portugueses y Latinoamericanos, en el Departamento de Lenguas y Culturas Europeas en la Universidad de Edimburgo.

CON TABLEROS SOBRE LA MESA, montoncitos de fichas, tarjetas con pictogramas que no dejan lugar a dudas y una gritona para dirigir el juego, las mujeres reunidas para jugar esta singular lotería reflexionan sobre la criminalización de las protestas feministas. A la consigna de: “Queremos dejar de tener miedo de…” arranca la Lotería del Miedo. Una a una las tarjetas se van cantando, al tiempo que se proyectan en una pantalla, para que todas las participantes las puedan ver, por si no tienen las imágenes en su cartón. “Nunca nos ha tocado que nadie grite emocionada que ganó, como sucede en el juego tradicional. Más bien articulan un ‘¡Lotería!’ muy bajito”, afirma Stengel. “Tampoco he conseguido conservar los juegos completos luego de una partida: siempre hay alguien que se quiere llevar su tablero”.

"El aprovechado en las fiestas"
"El aprovechado en las fiestas"

Al término de cada sesión es muy común que se mencionen nuevos miedos que no se tenían contemplados en este juego que todas jugamos, aún sin quererlo. La Lotería del Miedo se ha llevado a varios espacios en los estados de Querétaro y Sinaloa, pero también está presente en el Reino Unido y en Polonia, a través de ONGs que hacen trabajo con mujeres. En el extranjero se han revelado nuevos temores, como discriminación, fascismo, xenofobia, por mencionar algunos. Es que los problemas de género no conocen límites geográficos y esta iniciativa se adapta a diferentes contextos culturales, pues la experiencia de la violencia de género nos impacta de muchas maneras, a diferentes niveles.

La Lotería del Miedo se ha mostrado como un arma poderosa para romper el pacto de silencio que suele rodear muchas formas de agresión y opresión. Al compartir los recelos que las mujeres experimentamos se gestiona un espacio para la reflexión, la empatía, la solidaridad.

EL PROYECTO SIGUE en construcción: falta identificar otros miedos frecuentes, cómo son, en qué contexto surgen. Y existe también la intención de crear una Lotería de nuevas masculinidades, como un paso fundamental hacia la promoción de relaciones de género más equitativas, respetuosas. Este proyecto podría ayudar a desafiar los estereotipos de las masculinidades tóxicas y fomentar una cultura que promueva respeto e igualdad entre géneros, que fomente crear conciencia y contribuya a la educación de una sociedad más justa.

El enfoque disruptivo de la Lotería del Miedo invita a repensar el potencial de las expresiones culturales y pone en evidencia que la creatividad y el talento conjunto pueden incidir de forma positiva en un cambio profundo. La Lotería del Miedo se puede descargar aquí: https://nataliastengelp.wixsite.com/loteriasinmiedo/la-loter%C3%ADa