Textos disidentes

El sino del escorpión

Letras Libres
Letras Libres Foto: Especial

Habitante de los resquicios, el escorpión sabe de las voces orilladas a los márgenes por los turiferarios del canon y los policías del buen gusto. En el coro de esas voces literarias alternas, afinadas en la oscuridad, el alacrán ve luz, deslumbramiento artístico, experiencia estética formativa.

Hasta su grieta en el muro llega entonces al escorpión la alharaca en torno a las revistas culturales mexicanas Nexos y Letras Libres. Opiniones encontradas, lamentos, reclamos, listados de autores y de abajofirmantes aderezan la discusión en los mentideros político-culturales, y traen a la memoria del alacrán la carta abierta a Enrique Krauze escrita por Rafael Lemus el 5 de diciembre de 2013, cuando decidió renunciar al consejo de Letras Libres y abandonar la revista.

En ese momento, Lemus era el crítico y ensayista literario más joven y brillante de la publicación, donde escribió por más de una década. Sus polémicas reseñas, su apuesta por el talento contra la mera promoción, así como su crítica a la literatura mexicana por su inmovilidad, falta de rebeldía y de experimentación, abrieron territorios más libres a la crítica y la literatura misma.

“Como sabes, desde hace tiempo me he ido desplazando hacia la izquierda y, casi por carambola, mi distancia intelectual e ideológica con la revista ha crecido, al grado de que hoy rara vez coincido con sus posturas políticas y estéticas”, dice Lemus en la carta.

Lemus era el crítico y ensayista
literario más joven de la publicación

Más adelante agrega: “Ocupada en censurar toda práctica de izquierda, la revista desatiende sistemáticamente asuntos que me parecen cruciales: la desigualdad, la exclusión, la precariedad económica. Consagrada a defender un liberalismo que terminó por volverse hegemónico, apenas si hace la crítica de nuestro presente, de las sociedades capitalistas y democracias liberales en que vivimos”. ¡Tómala, barbón!, como dicen por el rumbo del venenoso.

La cosa no para ahí. “No comparto la hostilidad de buena parte de los consejeros ante todo aquello que rebasa los bordes del humanismo liberal (la “teoría”, la academia, los estudios culturales, el arte contemporáneo, las vanguardias, los estridentistas, [Mario Santiago] Papasquiaro y lo que se acumule esta semana), y desde luego no planeo sumarme a ninguna cruzada contra ello”.

El escorpión no encontró un enlace a la carta, pero se puede consultar en la red aunque fragmentariamente, y más allá de las críticas a Lemus de escritores de izquierdas y derechas, su bien documentada disidencia marcó para mal a esa revista. Su carta ilumina los acontecimientos actuales con la fuerza de la crítica y la razón, insiste el alacrán.