Desde que entró a formar parte de la familia real británica, Meghan Markle se ha convertido inevitablemente en el centro de todas las miradas allá donde va, pero cuando la ocasión lo requiere la antigua actriz sabe muy bien cómo pasar desapercibida.
Eso explica, por ejemplo, que no haya trascendido hasta ahora que la duquesa de Sussex voló la semana pasada a Canadá antes de retomar su agenda esta semana, acudiendo a una representación del musical 'Hamilton' en el West End londinense cuya recaudación iba a destinada a una de las organizaciones benéficas con las que trabaja su marido el príncipe Enrique.
[caption id="attachment_793476" align="alignright" width="300"] Meghan Markle y Jessica Mulroney. Foto: Especial[/caption]
La duquesa viajó a bordo de un avión comercial hasta Toronto para pasar tres días junto a su buena amiga Jessica Mulroney. Las dos tuvieron la oportunidad de ponerse al día mientras disfrutaban de una de sus pasiones compartidas, la cocina, en la casa que la segunda comparte con su marido y sus tres hijos. A lo largo de su visita, Meghan solo abandonó la vivienda en una ocasión, para cenar una noche con varios amigos en el centro de la ciudad.
La estrecha relación que mantienen las dos mujeres se remonta a 2011, cuando la antigua actriz se mudó a Toronto para iniciar el rodaje de la serie 'Suits'.
Desde entonces también han trabajado juntas en algunas ocasiones ya que Jessica es estilista con buena reputación y ha sido la responsable de algunos de los looks más icónicos de la duquesa, como el abrigo blanco que eligió para el anuncio de su compromiso y varios de los atuendos que ha lucido en sus apariciones públicas posteriores.
Además, los tres hijos de Jessica participaron en el enlace real del pasado mayo: sus gemelos de 7 años, Brian y John, ejercieron de pajes junto al príncipe Jorge, mientras que su pequeña Ivy, de 4 años, fue una de las damitas de honor.
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