El cantante canadiense Justin Bieber desde edad muy temprana estuvo expuesto al exigente ojo público de ser una de las estrellas internacionales del pop con mayor impacto de la última década, algo que significó tanta presión en su vida que lo llevó a un camino difícil, rodeado de abuso de drogas que provocaron que incluso su propio equipo tuviera que revisar su pulso mientras dormía para comprobar si seguía con vida.
En entrevista a medios internacionales, Justin Bieber reveló lo grave que se volvió su dependencia a las sustancias con las que intentaba escapar de la realidad, pues aseguró que, a pesar del éxito, “seguía triste y sintiendo dolor”.
Teniendo tanto dinero, poder y viviendo en Los Ángeles con amistades como Chance the Rapper, el intérprete confesó que, en ocasiones, algunos de sus guardias de seguridad se colaban en su habitación por las noches para asegurarse que su corazón siguiera latiendo y él siguiera con vida.
“Pensé que todo el éxito iba a mejorar las cosas. Y para mí, las drogas eran como un agente adormecedor para continuar atravesando lo que estaba pasando”, comentó el canadiense, quien hoy tiene 27 años, se encuentra rehabilitado y parece haber encontrado estabilidad con su esposa, Hailey Baldiwn.
Durante sus primeros años de fama, Justin Bieber tuvo problemas con la ley, se enfrentó a los paparazzi que lo acosaban y provocaban a donde sea que fuera, y se vio forzado a lidiar con sus problemas personales frente al mundo entero mientras que intentaba llevar su carrera musical por el lugar correcto.
ntb