Legendario

The Rasmus enloquece la CDMX con su oscuro y energético concierto (VIDEOS)

The Rasmus ofreció un estruendoso, oscuro e inolvidable concierto en el Pepsi Center de la CDMX; así se vivió el show

The Rasmus enloquece la CDMX con su oscuro y energético concierto Foto: Especial

El Pepsi Center WTC se puso emo, vampírico y bélico con el esperado concierto de la banda finlandesa The Rasmus, la cual regreso a los escenarios tras un larga pausa y cambio de guitarrista, pues el año pasado Pauli Rantasalmi abandonó el grupo, tomando su lugar Emppu Suhonen.

El show arrancó potente con la estruendosa "First Day of my Life", la cual puso a todos aquellos que se vestían y maquillaban de negro en los 2000 a brincar en euforia, pese a que ya podrían tener problemas de articulaciones.

"Los extrañamos chicos! ¿Pueden cantar está? México, ¡enséñenme!", Gritó Lauri Ylönen, el vocalista, antes de cantar la dolida, pero energética "Guilty". "Son sorprendentes, gracias a todos por estar aquí ¡sold out!", agregó el también compositor antes de que The Rasmus interpretara la antaña y clásica "In My Life", de la cual dijo: “esta canción es sobre nunca rendirse”

"Emppu, qué bueno tenerte con nosotros, ¡te amamos!", le dijo Lauri a la nueva guitarrista de la banda, para continuar el espectáculo con "No Fear". Finalizados los guitarrazos, el cantante le pasó el micrófono a Eero Heinonen, el bajista, quien le manifestó el amor que la banda le tiene a México, país que casualmente es donde más escuchas mensuales tienen en Spotify

“Hoy nos preguntaron ¿Qué hay entre México y The Rasmus? No sabíamos que decir, pero creo que es amor. Desde la primera vez que los conocimos, en 2004, ha sido mágico, ha sido hermoso ¡gracias por estar aquí!", externó, para seguir el show con “Paradise” y “Fireflies”, en la cual hacen una colaboración con el rapero Charles Ans.

“Tenemos muchas memorias de aquí México. Recuerdo que la primera vez que estuvimos aquí tocamos en el Salón 21 ¿alguien estuvo ahí?”, comentó Lauri sobre el extinto venue y antes de que la banda tocara "Time to Burn", “Live and Never Die” y “Wonderman”.

Para bajar los ánimos un poco, The Rasmus sacó el setlist acústico, el cual comenzó con “Still Standing”, canción que, en palabras de Lauri: “hace años, cundo teníamos como 19 años, teníamos una buena amiga, era una persona sorprendente, me enseñó cosas de la vida, pero murió muy joven… escribimos esta canción para ella”.

La siguiente fue “October & April”, para cual los más de 7 mil fans amalgamados en el Pepsi Center sacaron sus celulares para consumir la oscuridad con sus luces. La última canción acústica fue “Sophia”, uno de los primeros temas de la banda, de cuando eran aún adolescentes y se llamaban simplemente Rasmus.

“Cuando era joven, vivía en la misma área que los chicos y una de mis canciones favoritas de ellos, de 1997, era ésta”, compartió Emppu antes de tocar.

La energía y el estruendo regresaron con “Rise” e “Immortal”, canciones tras las cuales la noche se puso paranormal y ectoplásmica con el cover del tema de los “Cazafantasmas” que The Rasmus lanzó en su primer disco, "Peep", cuando los integrantes apenas tenían 16 años.

“¿Recuerda el disco ‘Black Roses… Rosas Negras? Queremos tocar algunas canciones de ese disco, ¿aún tienen energía?”, pronunció Lauri como preludio de “Justified” y “Livin' in a World Without You”, las cuales fueron precedidas por “F-F-F-Falling” y la legendaria “In The Shadows”, “la canción clave que nos trajo aquí hace 20 años”, destacó el líder de The Rasmus.

Para el cierre del concierto, Lauri le pidió a todos los presentes cerrar los ojos un momento mientras el cantaba la trágica “Funeral Song”, la cual aparentemente le dedicó al ex guitarrista Pauli, pues le dedicó un mensaje:

“El año pasado Paulin dejo la banda y fue devastado, el grupo se separó por unas semanas… pero llegó Emppu como nuestra ángel guardián… Y por eso cantamos ‘Jezebel’”, pronunció celebrando a la nueva guitarrista y anunciando el sencillo con el cual la presentaron ante sociedad.

La euforia y éxtasis de los fans fue tal que a Lauri se e salieron unas cuantas lágrimas de la emoción y, tras recibir los apapachos vocales del público, The Rasmus se despidió: “Gracias por todo… ¡Los amamos! Es tiempo de la última canción”, dijo el artista antes de que el grupo finlandés se despidiera con la emotiva y adecuada "Sail Away".