La emblemática Cristina Pacheco murió este 21 de diciembre, devastando al mundo de la cultura y la farándula mexicana, tras perder la dura batalla contra el cáncer y días después de haberse retirado de la televisión.
Desde la noche del jueves se desarrolló el funeral de la comunicadora en la CDMX, lugar en el que una de sus hijas, Laura Emilia Pacheco, concedió una entrevista a la prensa en la que habló acerca de su sentir respecto al deceso de su progenitora.
“Perder a mi madre es una cosa terrible, es una cosa devastadora de raíz y un sentido de orfandad verdaderamente terrible, pensé que iba a ser igual (que con la muerte de su papá) pero no fue así”, inició en sus devastadas palabras.
La hija de Cristina Pacheco contó que no tuvo la oportunidad de despedirse de su madre ni de escuchar sus últimas palabras: “Ella no creía nada en eso, era decepcionante que uno piensa que va a tener unas últimas palabras, que nos vamos a poder despedir como en las películas y la vida no es así”.
Asimismo, la hija de Cristina Pacheco habló acerca del cáncer que padecía su mamá, el cual la acató por sorpresa y de manea veloz.
"Tuvo cáncer, un cáncer fulminante y muy rápido. Por eso se tuvo que despedir del programa, de otra manera no lo hubiera hecho jamás porque era su vida y le encantaba. Pero sí, la situación ya era insostenible y fue muy rápido".
“Ella decía ‘yo no estoy cansada, estoy enferma, porque de no haber estado enferma, nunca habría dejado ese programa’. Decía ‘me siento en esa silla y se me olvida todo, me siento en esa silla y todo es posible”, remarcó.
Agregó que probablemente la famosa ya sentía alguna incomodidad en su salud, pero que no dijo nada porque “se hubiera metido en tratamientos que le hubieran quitado el tiempo y no hubiera podido trabajar”.
Asimismo, Laura Emilia Pacheco no quiso revelar el tipo de cáncer que fulminó a su madre: "No importa, el caso es que se lo diagnosticaron. Ella decía ‘yo no estoy cansada, estoy enferma, porque de no haber estado enferma, nunca habría dejado ese programa’. Decía ‘me siento en esa silla y se me olvida todo, me siento en esa silla y todo es posible”.
"Cuando la enfermedad es cruel, porque es una enfermedad muy cruel, realmente no hay esos momentos, a mí me quedó una sensación terrible. Nunca había presenciado un cáncer y me quedé muy enojada pensando qué pasa con las personas que no tienen para comprar un medicamento de 5, 10 mil pesos", finalizó.