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Anatomía de una caída, un drama judicial

¿Qué le pasó a Samuel? Ésta es la pregunta que intenta responder Anatomía de una caída y a partir de la cual se desarrolla una trama atrapante de inicio a fin

Imagen del cartel promocional de la película. Especial

¿Qué le pasó a Samuel? Ésta es la pregunta que intenta responder Anatomía de una caída y a partir de la cual se desarrolla una trama atrapante de inicio a fin, que gira principalmente alrededor del juicio en el que se busca probar la culpabilidad o inocencia de una mujer sospechosa de provocar la caída que causa la muerte a su esposo.

Durante un aparente día normal en la vida de una familia, un hombre es encontrado muerto en circunstancias dudosas y conforme avanza el tiempo su esposa, la escritora Sandra Voyter —interpretada con maestría por la actriz alemana Sandra Hüller— se va convirtiendo en la posible responsable del supuesto accidente y las sospechas aumentan conforme se presentan una serie de pruebas a lo largo de un desgastante juicio en el que la mayor parte del tiempo parece que la fiscalía tiene todo a su favor.

Más allá de la inocencia o culpabilidad de la mujer acusada de asesinato, el proceso judicial revela los detalles más íntimos y oscuros de una relación amorosa en declive, lo cual se convierte en el verdadero hilo conductor de una historia profundamente emocional que funciona para analizar la condición humana y como un retrato realista de hasta qué punto de quiebre pueden llegar las personas en sus relaciones debido a las complicaciones que se presentan en éstas.

El guion escrito por la cineasta francesa Justine Triet junto a Arthur Harari, toma fuerza en la pantalla gracias al preciso trabajo interpretativo a cargo de Hüller, quien es dirigida con precisión para llevar el peso de la historia a través de sus diálogos y acciones para expresar cada una de las emociones que pasan por su personaje mientras ve cómo su vida se va derrumbando. Por otra parte, la edición, especialmente en las escenas del juicio, juega un papel determinante para que el ritmo sea constante.

Este drama, en apariencia sencillo, se vuelve una reflexión que invita al público a pensar mientras que dudosos narradores intentan convencerle, cada uno, de que su versión de los hechos expuestos es la verdad absoluta. La tensión y el suspenso son claves para un relato fascinante.

Después de ganar la Palma de Oro a Mejor Película en la pasada edición del prestigioso Festival de Cannes, la cinta francesa poco a poco fue captando la atención del mundo, hasta convertirse en una invitada recurrente en diversas entregas de premios. Se estrena hoy en los cines de México.