Alfonso Obregón, la voz del mismísimo Shrek, anunció que emprenderá acciones legales en contra de las personas que lo acusaron de abuso sexual, pues agregó que además está recibiendo amenazas por parte esos individuos.
A través de un comunicado que subió a sus redes sociales, Alfonso Obregón señaló que había intentado evitar hablar públicamente sobre la acusación que se le hizo de presuntamente haberle hecho tocamientos indebidos a una joven actriz de doblaje, señalamientos de los cuales fue absuelto.
El famoso señaló que ha sido amenazado por quienes lo acusaron de abuso sexual, tanto por parte de la chica como su abogado, que es su mismo padre. Alfonso Obregón agregó que las amenazas están vinculadas a presiones para que la denunciante pueda obtener trabajo en la industria del entretenimiento.
¿Quién es Chloe Bailey? La cantante que se hizo tendencia por su disfraz de Jessica Rabbit en Halloween 2024
“Intentaba seguir adelante con mi vida, pero hasta ahora he sido objeto de extorsiones y amenazas por parte de la chica y de su representante legal (su progenitor), mismas que tienen el propósito de que yo intervenga para que la persona que levantó la denuncia en mi contra obtenga trabajo dentro del medio y el mundo artístico”, lamentó.
Alfonso Obregón agregó que el video con el que presuntamente lo incriminaban es falso y que fue alterado: “Demerito el supuesto video donde se confirma que yo soy culpable, revelando que está manipulado y que, por ende, no se presentó como prueba ante las autoridades”.
Por ello, la voz de Shrek y Kakashi anunció que demandará a estas personas por dañar su reputación, pues cuenta con los documentos legales necesarios para respaldar sus acusaciones contra esta gente.
“Al encontrarse en riesgo mi reputación, mi vida laboral, mi dignidad y la percepción pública que se tiene de mí, a pesar de contar con la documentación legal que respalda la veracidad de mis afirmaciones, procederé legalmente en contra de aquellos que han difundido falsedades, mentiras y calumnias en mi contra”, concluyó.
