Concierto en el Estadio GNP Seguros

Eric Clapton da a la CDMX una noche mágica de blues y rock

El legendario guitarrista ofrece un espectáculo memorable en el país tras 23 años de ausencia; deleita con clásicos de su carrera como “Sunshine of Your Love” y “Tears In Heaven”

El artista durante su concierto en la CDMX.
El artista durante su concierto en la CDMX. Foto: José Jorge Carreón / OCESA

Tuvieron que pasar 23 años para que el virtuoso de la guitarra inglés, Eric Clapton, volviera a México para ofrecer una noche mágica al ritmo de blues y rock en el Estadio GNP Seguros, la noche del jueves ante 33 mil fans.

Eric Clapton no necesitó de un show con una megaproducción —juegos de luces, proyecciones o fuegos artificiales— porque fueron suficientes sus músicos y él, con su voz y guitarra, para llevar al público de todas las edades a un fino viaje musical en el que más de una vez se suspiró o uno quedó como hipnotizado por las sonoridades que emanaban de los instrumentos.

El show comenzó con “Sunshine of Your Love”, de la época en la banda Cream. El tema permitió a Eric Clapton lucirse en la guitarra, especialmente en ese solo compuesto por él y que provocó los gritos de emoción de los presentes. Después siguió un tema de los años 40, “Key To The Highway”, cover del pianista Charlie Segar.

Y ya para “I’m Your Hoochie Coochie Man”, de Willie Dixon, una de las más aplaudidas en este arranque, el protagonista fue el blues.

Eric Clapton, uno de los símbolos de la rebeldía y sicodelia de los años 60 y 70, a sus 79 años ya tampoco necesita brincar o “destrozar” la guitarra como un rockero, sino entregarse con maestría a la música, como lo hizo con el clásico de Cream, “Badge”, que sorprendió y se llevó los aplausos con el efecto de guitarra que hizo.

Luego de aquellas evocaciones a los locos años 60 y 70, vino la parte acústica del espectáculo, con Eric Clapton sentado con guitarra en mano como si estuviera en un bar compartiendo su música con sus amigos. Primero fueron sólo él, su guitarra y su voz, dejando para la memoria un momento inolvidable, y luego poco a poco se fue uniendo el resto de la banda y coristas para interpretar “Running On Faith” y “Change The World”, este último, un cover de Wynonna Judd.

Más de 33 mil amantes del rock  disfrutaron del espectáculo.
Más de 33 mil amantes del rock disfrutaron del espectáculo. ı Foto: José Jorge Carreón / OCESA

La noche se llenó de nostalgia y fue la antesala para conmoverse con la bella y triste canción “Tears In Heaven”, que está dedicada a su hijo Conor, quien falleció a los cuatro años en un accidente.

Después, Eric Clapton trajo de nueva cuenta ese rock rebelde con “Got To Get Better In A While” y “Old Love”, en esta última demostró por qué es llamado “Slowhand” y por qué tiene esta capacidad de llevar a sus fans a un viaje musical que puede ser de lo más tranquilo hasta lo más desenfrenado y de nuevo devolver a la calma para sólo suspirar, gritar o aplaudirle.

Mientras que con “Cross Road Blues” y “Little Queen of Spades” nos llevó por los territorios del rock, pero también del jazz y el blues.

En el concierto no podía faltar otro clásico de Eric Clapton “Cocaine”, del disco Slowhand, que puso a cantar todo el Estadio GNP Seguros y en la que el músico y quienes lo acompañaban hicieron una interpretación exquisita.

Tras varios aplausos, el show terminó con una buena dosis de rock y blues con “Before You Acuse Me”, de Bo Diddley, que Eric Clapton incluyó en el álbum Journeyman.

Con este viaje musical, Eric Clapton celebró con sus fans mexicanos sus 60 años de carrera.