The Brutalist es una de las películas favoritas para esta temporada de premios, pues es considerada por muchos como una de las mejores en realizarse este año; sin embargo, ahora la cinta enfrenta una fuerte polémica por el uso de Inteligencia Artificial en algunos de los aspectos que conforman al filme de Adrien Brody.
‘The Brutalist’ usó IA
De acuerdo con lo que contó el editor de The Brutalist, Dávid Jancsó, se utilizó una empresa de software ucraniana llamada Respeecher. Esto para mejorar los diálogos. “Mi lengua materna es el húngaro y sé que es uno de los idiomas más difíciles de aprender a pronunciar”, ha declarado Jancsó a Red Shark. “Es un idioma muy particular. Entrenamos [a Brody y Jones] e hicieron un trabajo fabuloso, pero también queríamos perfeccionarlo para que ni siquiera los locales notaran diferencias”, admitió.
En ese sentido, cuenta que los actores grabaron sus diálogos para el software y él hizo lo mismo para suavizar los acentos complicados. “La mayoría de sus diálogos en húngaro tienen una parte de mí”, admitió. “Fuimos muy cuidadosos a la hora de respetar sus interpretaciones. Se trata sobre todo de sustituir letras aquí y allá”.
El software también los ayudo a la creación de algunos de los edificios de la película, pues al final de The Brutalist, con la IA se creó “serie de dibujos arquitectónicos y edificios terminados” con el estilo del protagonista, László Tóth. Las explicaciones no han detenido la molestia del público, quienes critican que se use inteligencia artificial en vez de trabajo real de personas.
Algunos han aprovechado los comentarios para reírse del asunto y señalan a modo de broma que los responsables de esta cancelación a la película de Adam Brody es culpa de su competidora, Conclave Otros se cuestionan si el uso de la IA hace que el producto sea menos valioso y unos más, indican que esto podría evitar que la cinta se coronara como ganadora.
¿De qué trata ‘The Brutalist’?
The Brutalist aborda la migración y el sueño americano. La historia aborda la vida de László Tóth, interpretado por Adrien Brody, quien es un arquitecto judío nacido en Hungría, quien sobrevivió al Holocausto y se muda a Estados Unidos con su mujer.
La vida le sonríe cuando consigue un contrato con un misterioso y adinerado cliente, Harrison Lee Van Buren y el arquitecto se enfoca en la construcción del edificio brutalista de sus sueños, hasta que un incidente hace que todo dé un giro inesperado.
