Britney Spears perdió la demanda contra la tutela de su padre, motivo por el cual aseguró no volverá a cantar y se retirará de la música y los escenarios.
Este martes, una jueza de California declinó a la cantante su petición de recuperar el control de su vida, carrera y dinero, que desde hace 12 años están bajo el poder de su progenitor, James Spears.
"Mi cliente me ha informado que le tiene miedo a su padre y que no volverá a actuar mientras él esté a cargo de su carrera", señaló el abogado de Britney, Samuel D. Ingham III, durante la audiencia.
Pese a la advertencia, la jueza Brenda Pennyse negó la suspensión del padre de Spears, aunque se mostró partidaria de escuchar los argumentos futuros que el abogado de Britney planea presentar. La próxima audiencia será el 16 de diciembre.
Por su parte, la abogada de James Spears, Vivian Thoreen, argumentó que, bajo su tutela, el patrimonio de la artista se ha elevado a los 60 millones de dólares.
James Spears posee la tutela de Britney desde 2008, año en que la cantante sufrió un colapso mental. En agosto pasado, otro tribunal decidió que ésta se prolongue hasta 2021.