Erik Rubín, el ex esposo de Andrea Legarreta, tiene a sus fans preocupado y “con el Jesús en la boca”, pues, además de que aun no se sabe nada concreto del futuro con la relación con la madre de sus hijas, ahora el famoso reveló que está delicado de salud.
Fue a través de sus redes sociales donde Erik Rubín dio a conocer la noticia de su herido estado de salud, el cual lo tiene postrado en la cama, generando más alarmas pues es conocido por ser un adicto al ejercicio y estar gran parte de su día jalando pesas.
De acuerdo con la información que reveló el papá de Mía Rubín, todo sucedió cuando él se encontraba de un viaje en Estados Unidos, presuntamente por temas laborales, pero fue víctima de una mal que pulula en ese país consumidor de fentanilo: la comida horrible.
Y es que Erik Rubín reveló que está sufriendo severos problemas estomacales, mismos que al parecer evolucionaron en una fulminante infección que lo tumbó al grado que tuvo que guardar reposo en la cama.
No obstante, como famoso cringe que es, decidió tomarse una foto todo enfermo para así generar interacciones y posiblemente lástima entre sus miles de seguidores. Pues, por si fuera poco, a su foto le agregó un sticker de gatito enfermo, lo cual implicaría que ni se siente tan mal y que su intención era figurar de una manera que no involucrara su relación con Andrea Legarreta.
Erik Rubín no dio mayores detalles de su malestar y, además de enviarle decenas de mensajes de apoyo, los fans especulan que su salud ya mejoró que podrá cenar mucho bacalao y pavo en año nuevo junto a sus hijas, posiblemente.
