El millonario y escandaloso juicio entre el histrión Johnny Depp y su exesposa, la actriz Amber Heard, ayer tuvo su primera etapa con la selección de jurado en Fairfax, Virginia, Estados Unidos, después de tres años de espera. El protagonista de Piratas del Caribe la acusa de difamación al retratarlo como un abusador doméstico.
Depp demandó por 50 millones de dólares a Heard por un artículo de opinión que ella escribió en el diario The Wa-
shington Post, en 2018, en el que se refiere a sí misma como “una figura pública que representa al abuso doméstico”.
El artículo no menciona a Johnny Depp por su nombre, pero dice que claramente se refiere a las acusaciones que hizo Heard en otros foros sobre que sufrió abuso físico a manos del actor, quien niega las acusaciones.
El astro ha señalado que dichas acusaciones le ocasionaron pérdidas económicas, entre ellas, que fue eliminado de futuras cintas de Piratas del Caribe.
Ayer, en lo que supone uno de los juicios más mediáticos, una decena de mujeres, algunas con letreros que decían “Justicia para Johnny” se unieron a otros fans que llevaban banderas de pirata en referencia al famoso papel de Depp en las películas de Piratas del Caribe, quienes estaban fuera de la corte desde una hora antes de la audiencia.
La corte en la ciudad de Fairfax quedó cerrada al público, con acceso limitado al circuito cerrado. La gente que pudo ingresar hizo fila desde las siete de la mañana para esperar por los brazaletes que les darían acceso.
La juez que supervisa el juicio, Penney Azcarate, impuso una serie de reglas para entrar a la corte con el fin de mantener el decoro. Uno de los más importantes es que ni Depp ni Heard pueden posar para retratos o firmar autógrafos en la corte, ni en el terreno del tribunal.
Los fans de Depp han apoyado abiertamente al actor argumentando que ha sido falsamente acusado. Raylyn Otie, una seguidora de la estrella del cine de Bluefield, Virginia, condujo por cinco horas para ver al astro y se sintió desilusionada cuando no saludó personalmente a los fans, pues los oficiales limitaron el acceso de los admiradores.
“Estoy tan decepcionada, vine para darle flores para mostrarle apoyo”, dijo Otie con un ramo en la mano.
La defensa de Heard intentó infructuosamente que el caso de Virginia fuera llevado a California, donde viven los actores. Un juez de Fairfax dictó que Depp estaba en su derecho de presentar el caso en el estado porque las ediciones online de The Washington Post se publican a través de servidores ubicados en dicho condado.
Los abogados de Depp han dicho que presentaron el caso en Virginia en parte porque las leyes locales son más favorables para su caso. Se espera que el juicio dure más de un mes.
En otro tribunal, un juez desestimó un caso independiente que Depp presentó contra un diario británico. Determinó que el actor atacó a Heard en múltiples ocasiones y la hizo temer por su vida igualmente en diversos momentos.
Heard presentó, por su parte, una contrademanda en la que acusa a los abogados del histrión de difamarla siguiendo las indicaciones de Depp.
Con información de AP