El director mexicano Luis Estra da ve en Las muertas, de Jorge Ibargüengoitia, paralelismos con su filmografía: el humor negro y sátira que ha manejado y la “crítica demoledora al país”. Tras casi cinco décadas de querer adaptar esta novela, que aborda la historia de Las Poquianchis, cumple su sueño e incursiona en las series para llevar a la pantalla chica este relato.
“Llevo soñando con hacerlo desde que tengo 15 años, cuando en 1976 mi papá estaba trabajando en la adaptación de Maten al león, otra novela de Ibargüengoitia, tuve oportunidad de conocerlo personalmente, es uno de mis escritores favoritos no sólo de México sino del mundo”, comentó ayer en conferencia de prensa Luis Estrada, quien debuta en las series de la mano de Netflix, plataforma que se ha enfocado en adaptar obras de la literatura latinoamericano como Pedro Páramo y Cien años de soledad.
En Las muertas, a manera de reportaje novelado, Ibargüengotia cuenta la historia de las hermanas proxenetas conocidas como Las Poquianchis, pero en la obra las llaman hermanas Baladro.
“Tuvo acceso al expediente del juicio, se da cuenta que fueron unas hijas de la chingada, asesinas, proxenetas, pero la verdad no era la que estaban contando los medios y decide retomarlo, lo que hizo y creo que descubrí, es que casi había escrito un guion y sólo faltaba filmarlo, se me ha hecho el sueño”, agregó el realizador.
Luis Estrada destacó que el reto de llevar a la televisión Las muertas, no radica en cómo recrear lo que escribió Ibargüengotia, porque el relato es muy cinematográfico, el desafío está en incorporar esa sátira que presentó el autor.
“Llevo toda una carrera tratando de entender cómo funcionan el humor negro y la sátira, en realidad todas mis películas anteriores han sido una manera de prepararme para abordar este humor tan difícil y arriesgado, porque reírse de unas madrotas que compran y venden niñas de 12, 13, 14, 15 años y luego las torturan, luego se les mueren, es un reto formidable, pero no está completamente conseguido en la novela y es a lo que aspiramos en esta serie de películas”, abundó el director de El infierno.
Paco (Francisco Ramos, vicepresidente de contenidos de Netflix) me dijo ‘por qué no intentamos el camino de la serie’, no hago televisión, soy purista del cine, pero creo que ya no hay tantas fronteras como las había en algún momentoLuis Estrada<br>Director
Estrada dijo que los espectadores se podrán identificar con la historia, ya que lamentablemente la violencia, los feminicidios y la corrupción están presentes en el México actual.
“Hizo un retrato satírico de un país con un tono de gravedad al presentar este espejo desalmado de la realidad de México, que he tratado de hacer desde La ley de Herodes hasta ¡Que viva México! “, comentó el cineasta.
Contó que al igual que el escritor, le interesa hablar de nuestra nación. “Lo que hace Ibargüengoita y lo que queremos hacer en la adaptación es una vez más confrontar al público mexicano con su país, descubrir que no hemos cambiado tanto, que la violencia contra las mujeres, el feminicidio y la trata de blancas tienen raíces muy profundas ; que el machismo continúa siendo igual que lo fue hace cientos de años, pero también en los años 40, 50 y 60, a la mujer se le cosifica, pero ojo, no se trata de crear como nunca lo he querido crear es algo didáctico”, comentó Estrada.
Agregó que en Las muertas, Ibargüengoitia hace una crítica demoledora a este país y a sus instituciones. “Que Las Poquianchis hayan podido existir se dio en un caldo de cultivo, de complicidad, de impunidad y de corrupción con las autoridades, eso hace a la novela, un tema de una actualidad feroz, eso está pasando en un pueblo de México o en la casa de mis vecinos”, remarcó.
La serie Las muertas comenzó su producción y contará con los protagónicos de Arcelia Ramírez y Paulina Gaitán, quienes darán vida a las hermanas Baladro. Además participan histriones que han colaborado con el realizador en otras ocasiones, Alfonso Herrera y Joaquín Cosío, quienes formaron parte del elenco del filme ¡Que viva México!