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Martínez retrata la soledad del mundo godín

La directora Lorena Padilla sigue la historia de un contador de avanzada edad, gruñón y solitario de origen chileno; cuenta a La Razón que el personaje está inspirado en su padre

El actor Francisco Reyes (al frente), dando vida a Martínez.
El actor Francisco Reyes (al frente), dando vida a Martínez.Foto: Especial
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Lorena Padilla, directora de cine, confiesa que siente un interés por los personajes que aparentemente son pequeños. Aquellos que no hicieron grandes hazañas, como para ser representados en libros o películas: “Soy de sentarme en el parque a ver qué pasa, o irme a un café o un restaurante”, dijo a La Razón y explicó que de esa inquietud surge la intención de llevar a la pantalla la historia de Martínez.

Se trata de un hombre de edad avanzada, gruñón y solitario de origen chileno y de apellido Martínez, quien trabaja en un despacho de contadores en la Ciudad de México. Tiene una relación distante con sus compañeros, hasta que llega a la ecuación Pablo, su contra parte, un contador joven y extrovertido, quien aparentemente es su reemplazo.

“Soy muy chismosa. Va pasando alguien y pienso: ‘¿Cómo hará el amor?, ¿con quién llegará a su casa?, ¿vivirá solo?’ me interesa mucho eso”, apuntó Padilla, quien reveló que el personaje de Martínez está inspirado en su padre.

Francisco Reyes, actor que encarna a Martínez, quien —al igual que su personaje— es de origen chileno, explicó a este diario que la creación de este contador malhumorado requirió de un arduo trabajo de mesa.

“En la medida en la que nos íbamos adentrando en la historia y conforme empezó a interactuar con Conchita y con Pablo, que empezó a caminar esas calles —que no eran Santiago, sino Guadalajara— con ese sudor, con ese aroma; que la pandemia nos atacó y nos recluyó una semana por un brote de Covid; todos esos elementos fueron haciéndome encontrar en Martínez aspectos luminosos en él”, detalló Francisco Reyes.

El elenco lo completan Humberto Bustos, quien interpreta a Pablo, un contador joven y vivaz, y Martha Claudia Moreno, quien da vida a Conchita, una entrañable y simpática recepcionista. A pesar de que parecen personajes alegres y divertidos, esconden una profunda soledad.

“Me gustan mucho los personajes que son ‘el payaso triste’. Que tienen esta máscara de jovialidad y de entrega, cuando en realidad les está dando pavor ver su realidad, saber que están fantaseando de más, descubrir que no es lo que piensan que es, saber que está aterrado del futuro”, explicó Bustos a La Razón.

El actor apuntó que estas historias, ambientadas en oficinas o ambientes laborales tan cotidianos, reflejan dramas inmensos, pues no hay nada como el enfrentamiento con uno mismo.

Martínez es la ópera prima de Lorena Padilla y se está en competencia oficial por el Premio Mezcal en el 38 Festival Internacional de Cine en Guadalajara.